El dirigente José Giraudo afirmó que hace aproximadamente tres años que no habla con el gobernador Alberto Rodríguez Saá, al “descartar de plano la posibilidad de participar dentro del oficialismo en las próximas elecciones de 2023”, al tiempo que cuestionó en duros términos el estilo de conducción del mandatario, a quien comparó con el “despotismo ilustrado francés, cuyo lema era todo para el pueblo pero sin en pueblo”.

La consulta de Apuntes de San Luis surgió a partir de declaraciones del gobernador Alberto Rodríguez Saá en su radio, FM Lafinur, cuando “supuso” que si se aprueba el proyecto de ley de lemas que envió a la Legislatura, tanto los sectores que orientan Adolfo Rodríguez Saá como Giraudo podrían llegar a competir con un sublema dentro del Frente de Unidad Justicialista.

“Francamente a mí me sorprendieron las declaraciones, porque la verdad es que yo no tengo ningún tipo de diálogo. Además no sé si en broma o como chicana dice que yo me fui al PRO, cuando los que me conocen saben bien que yo nunca estuve en ese partido. Así que no lo entiendo, no sé por qué lo dijo”, expresó.

Por otro lado Giraudo sostuvo que él no es “de esquivar el diálogo. Pero si vamos a hacerlo, hay que dialogar sobre el 38% de pobreza que tenemos en San Luis. Sobre el plan de viviendas que solía ser exitoso y masivo y que está abandonado. Hay que dialogar sobre el Plan de Inclusión Social, sobre la inseguridad… Ministro Anastasi: ¿dónde está Guadalupe? Señor gobernador: ¿dónde está Guadalupe?. ¿No hay una explicación sobre esos temas”, espetó.

En relación con la le de Lemas, el dirigente de Mercedinos por el Cambio señaló: “Sinceramente no me preocupa. No deja de ser un sistema electoral más, que no es ni bueno ni malo, como cualquier otro sistema electoral. Lo que me preocupan son las formas”, sostuvo, agregando que el gobierno “pudo haber convocado a un diálogo institucional a todos los partidos” para debatir esta cuestión, en lugar de decidirlo en forma unilateral, “lo cual es una imposición”.

En este sentido, enfatizó que esta forma de gobierno de Rodríguez Saá le recuerda a la “Francia del siglo XVIII, los Luises, la época del despotismo ilustrado. ¿Cuál era el lema? Todo para el pueblo, pero sin el pueblo. Pero como en realidad no quería juntarse con el pueblo, Luis XIV ordenó construir el Palacio de Versalles y gobernó desde allí. Y posteriormente Luis XVI ya directamente se fui a vivir con todos sus funcionarios allí, bastante alejado de París. Y se encerró tanto con la nobleza vernácula, en su propia realidad, que todos le decían que todo estaba bien en París. Y un día Luis XVI se enteró que le habían tomado la bastilla y que se produjo la revolución francesa”.

Continuando con su “analogía histórica”, Giraudo reconoció que “los Luises hicieron muchas cosas, pero nunca le preguntaron al pueblo qué quería, entonces un día les tomaron la Bastilla y así terminaron. Yo el otro día escuchaba al gobernador hablando de los villamercedinos, diciendo que una vez vino a la ciudad y alguien le dijo que no hacía nada por Villa Mercedes. Y él respondió: les hice La Pedrera, les hice la Calle Angosta, les hice el Molino Fénix, etc. ¿pero le preguntó alguna vez a los villamercedinos qué es lo que necesitaban o querían?”, se preguntó. “No –respondió-, lo hizo porque se le ocurrió a él, para el pueblo, pero sin el pueblo, todo con medidas despóticas”.

Añadió que tiene “muchísimas disidencias con este gobierno. Porque San Luis años atrás ostentaba los mejores índices en materia de desarrollo económico, de progreso, de educación, de construcción de viviendas, de empleo, etc. San Luis era un lugar en el mundo para venirse a vivir y progresar, hoy la provincia está con los peores índices en todos los ítems, comparables a otras provincias pobres como Formosa, Santiago del Estero o Chaco, que tienen índices desopilantes de pobreza y falta de desarrollo”.

Al tiempo de cuestionar que los 20 años del Plan de Inclusión Social marcan “el fracaso” de este gobierno, “que no les ofrece ninguna perspectiva de progreso a sus integrantes”, apuntó. “Han construido un Estado que lejos de ser moderno, progresista, desarrollista, se ha transformado en una máquina de generar pobres y expandir la pobreza”.

Finalmente Giraudo descartó que vaya a integrar alguna lista en el oficialismo o que en lo personal vaya a ser candidato en las próximas elecciones.

Por Eduado Gargiulo