El candidato a presidente de La Libertad Avanza, Javier Milei ha hecho pública su vocación de “avanzar en la eliminación del sistema de coparticipación federal de impuestos”.

La eliminación de la coparticipación propuesta por Milei quitará a San Luis el 80% de sus recursos, esto significa que sacará a la Provincia su mayor y principal fuente de financiamiento para el pago de los salarios públicos, para la compra de insumos y ejecución de proyectos.

En un acto realizado el pasado 14 de setiembre en la legislatura bonaerense, los dirigentes y candidatos de La Libertad Avanza fueron más allá y plantearon los mecanismos para eliminar la coparticipación federal. En el encuentro se expusieron tres métodos para la salida al sistema, dos a través del Congreso y una por la vía judicial.

En este orden de ideas, el candidato a presidente Javier Milei apoyó recientemente la iniciativa del kirchnerismo nacional de modificar el Impuesto a las Ganancias. Según cálculos efectuados por la oficia contable del Congreso de la Nación, con esta iniciativa las provincias registrarán una disminución de sus recurso por $ 1,6 billones. Para San Luis, significa que dejará de cobrar $ 38.000.000.000 en 2024.

A la delicada situación financiera que atraviesa San Luis, se le sumará la caída de recursos por la modificación del Impuesto a las Ganancias que se estima será aprobada la semana entrante por lo que la propuesta de Milei es un llamado de atención ya que de aprobarse desfinanciará a la Provincia generando problemas en la prestación de los servicios básicos de salud, seguridad y educación ya que no cuenta con otros recursos para hacerlo.

La Provincia financia sus erogaciones con recursos propios y recursos federales o nacionales. En el primer grupo están los que gestiona y administra el Gobierno local: impuesto sobre los Ingresos Brutos, Inmobiliario, Automotor, Sellos, tasas y contribuciones. En el segundo grupo se encuentran las remesas que gira el Estado nacional en concepto de coparticipación y demás transferencias automáticas. También existen otros recursos nacionales y provinciales pero no son de envergadura en tanto que –si se excluyen los ingresos figurativos, es decir, aquellos que no significan un ingreso financiero efectivo de fondos, como aquellos que no tienen continuidad temporal– representan solo el 2% del total de los recursos totales.

Luego del deterioro de la economía provincial en la gestión de Alberto Rodríguez Saa de estos últimos años, reflejado en el achicamiento del sector privado y expansión del sector público con índices de pobreza alarmantes, la Provincia empezó a depender cada vez más de la coparticipación federal que gira el Estado nacional.

Las remesas nacionales representan el 80% de los recursos totales de la provincia, por lo que, cualquier alteración o caída en la coparticipación dificultará el pago de las erogaciones locales.

El Régimen de Coparticipación Federal es el sistema que coordina la distribución de la recaudación tributaria entre el Estado nacional y las jurisdicciones locales y se encuentra regulado en la Ley Convenio Nº 23.548.

El mismo tiene sustento en la delegación que hicieron las provincias en materia impositiva mediante el cual éstas encomiendan al Estado nacional a recaudar impuestos, retener una porción para sí y distribuir el resto entre las jurisdicciones locales.

La coparticipación entonces reviste una transferencia automática de carácter devolutivo, redistributivo y solidario, puesto que el reparto entre el Estado Nacional y Estados provinciales, como también el reparto entre las provincias, debe garantizar un crecimiento armónico en todo el territorio nacional.

Se trata de un instituto histórico que hace a la esencia y a la propia historia constitutiva de nuestro país que adoptó el sistema federal de gobierno.