San Luis (LaNoticia) 06-03-17. Sergio Raúl Lombardi protagonizó un hecho de tránsito en Juana Koslay que terminó con la vida del joven Lucas Ezequiel Lucero.
Lombardi es un reconocido médico esteticista, especialidad médica de las que más dinero deja al profesional, y como San Luis es un lugar chico donde todos nos conocemos, nadie duda del potencial económico de Lombardi, salvo la Corpo Judicial…
Aunque parezca increíble, en los últimos días, Lombardi recibe el patrocinio letrado de, nada más ni nada menos, Claudia Soledad Ibáñez, quien es la Defensora Oficial. Sí, quien se supone que está para defender a los pobres y ausentes, es decir aquellos que no pueden pagar un abogado particular.
¿Es ilegal?
No, no es ilegal, pero la pregunta no debería ser esa sino ¿Es ético, es moral?
Porque acá el problema es que Ibáñez debe desatender a quienes está representando y que no tienen para pagar un abogado particular, para atender el caso Lombardi y de hecho presentó un recurso de revocatoria “in extremis”, para que el Superior Tribunal de Justicia deje sin efecto la última resolución que dio en el caso.
Un poco de historia
El 8 de septiembre de 2013, Lombardi embistió en Fray Mamerto Esquiú y avenida Aguada de Pueyrredón a la moto que conducía el joven Lucas Ezequiel Lucero, quien era acompañado por Dahyana Ojeda. En el hecho, Lucero falleció en el acto y Ojeda quedó con severas secuelas físicas.
Luego de idas y vueltas judiciales, casi siempre a favor del médico por su condición social y económica, la situación llegó al colmo cuando el 22 de octubre de 2015, la Cámara del Crimen Nº 2, en un fallo vergonzoso a todas luces, sin importar toda la prueba juntada en el expediente contra el esteticista, le dictó la falta de mérito a Lombardi.
Ante un recurso presentado ante el Superior Tribunal de Justicia, se resolvió el 25 de octubre de 2015, declarar la nulidad de todo lo actuado, dejando sin efecto la inexplicable falta de mérito dictada al médico esteticista millonario.
Ahora, de manera imprevista, la defensora oficial Ibáñez se presentó en representación de Lombardi pidiendo un recurso de revocatoria “in extremis”, pidiendo que se deje sin efecto la nulidad declarada por el Superior Tribunal y que, en consecuencia, se vuelva a dictar la falta de mérito sobre Lombardi.
Estamos a meses de que se cumpla el cuarto aniversario del hecho de tránsito, sin que la (In)Justicia ponga blanco sobre negro en este caso, porque obviamente hay un rico y famoso en el medio, porque hace un tiempito, en los barrios del Sur de la capital, un joven envistió con su auto a una auxiliar de Policía, quien resultó muerta en el hecho. El joven es empleado en una fábrica, no es rico y famoso, y es por eso que la Justicia le dictó la prisión preventiva.
Es increíble que este Poder del Estado se empeñe tanto en diferenciar con sus fallos entre pobres y ricos, dejando la impunidad para los poderosos y así transformarse, sin que los jueces siquiera se pongan colorados, en la (In)Justicia.
Carlos Rubén Capella
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