El gobierno griego anunció que hoy presentará propuestas para lograr un «acuerdo sostenible» con sus acreedores de la eurozona, que tendrán en cuenta las preocupaciones de los países prestamistas pero también el triunfo del «no» en el referéndum sobre los ajustes exigidos a cambio de ayuda financiera. Mientras tanto, el primer ministro Alexis Tsipras participa de una cumbre de jefes de Estado y Gobierno europeos.
Fuentes del Ejecutivo de Atenas señalaron que esta propuesta tendrá en cuenta «el resultado del referéndum, las posiciones comunes de los líderes políticos y las propuestas de las instituciones (la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI)».
Añadieron que en una reunión mantenida ayer antes de una cumbre de líderes de la eurozona, el primer ministro griego Alexis Tsipras, el presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, la canciller alemana, Ángela Merkel, y el presidente francés, François Hollande, discutieron «la hoja de ruta» a seguir para lograr resultados. Destacaron además que la propuesta griega está pensada para lograr un acuerdo «hasta finales de mes», lo que no significa que no tome en cuenta «otras propuestas» con el objetivo de preparar «un gran acuerdo sostenible» a largo plazo, informó la agencia de noticias EFE.
Las citadas fuentes confirmaron además que los ministros de Finanzas del euro, o Eurogrupo, celebrarán hoy una teleconferencia para examinar esta propuesta, luego de que el foro se reuniera ayer y de que su presidente, Jeroen Dijsselbloem, dijera que era inminente la presentación de una propuesta griega.
Tsipras participó de la cumbre extraordinaria de líderes europeos convocada para tratar la situación de Grecia, tras el referéndum del domingo en el que el rechazo a la propuesta de las instituciones fue secundado por más del 60 por ciento de la población.
Al llegar a Bruselas para el encuentro, la canciller alemana, Ángela Merkel, principal impulsora del ajuste neoliberal en Europa, afirmó que «no hay un camino posible» de salida de la crisis griega sin que el gobierno de Tsipras realice las reformas y ajustes que necesita. «No estamos hablando de semanas, sino de unos pocos días», dijo la canciller alemana, que también subrayó que «tras el fin del segundo programa de rescate (el 30 de junio) y el más que claro `no´ del referéndum, aún no hemos retomado las negociaciones».
En la misma línea se manifestó el primer ministro de Holanda, Mark Rutte, otro de los férreos críticos de las intenciones de Tsipras de poner fin con cinco años de ajustes impuestos por los acreedores que han sumido a Grecia en la pobreza y a su economía en recesión, y dispararon el desempleo hasta el 26 por ciento. «Atenas debe presentar propuestas ambiciosas para hacer frente a los problemas del país, ya que de lo contrario la negociación se acabará pronto», resumió Rutte, minutos antes del inicio de la reunión.