Marina Abigail Silva, la exagente policial imputada por el asesinato de sus dos hijos en Juana Koslay, permanecerá en prisión preventiva por 120 días más. La decisión fue dictada por la jueza de Garantía N°2 subrogante en feria, Agustina Dopazo Samper, quien accedió al pedido de la Fiscalía de Género. La fiscalía argumentó la necesidad de continuar recabando pruebas clave para el caso, así como el riesgo de fuga y de entorpecimiento de la investigación.
El plazo inicial de la prisión preventiva, impuesta el 2 de octubre de 2023, vencía este 29 de enero. Sin embargo, la fiscal Antonella Romagnoli sostuvo que aún restan diligencias fundamentales para avanzar en la investigación. Entre ellas, se destacan la realización de una pericia caligráfica sobre una carta dejada por Silva en la escena del crimen, la obtención de declaraciones de familiares y excompañeros policiales, y la recopilación de datos adicionales, como los de una segunda tarjeta SIM y el legajo profesional de la acusada.
Silva está imputada por el doble homicidio calificado de sus hijos, Bautista Silva Funes (2) y Sofía Ojeda Funes (7), ocurrido el 1° de octubre de 2023 en su vivienda del barrio Los Fresnos de Juana Koslay. Según la investigación, los menores fueron asesinados con dos disparos efectuados por su madre, quien fue detenida el mismo día del crimen.
Durante la audiencia, celebrada en la Sala de Oralidad N°1 del Poder Judicial, la fiscalía fundamentó la solicitud de prórroga en el artículo 208 del Código Procesal Penal. Romagnoli subrayó la gravedad de los hechos y la solidez de las pruebas ya recabadas, además de señalar que Silva, al haber pertenecido a las fuerzas de seguridad, mantiene vínculos que podrían influir en testigos clave.
Por su parte, la defensa de Silva, representada por el defensor oficial Carlos Guillermo Salazar, cuestionó la lentitud en la recolección de pruebas y solicitó la sustitución de la prisión preventiva por arresto domiciliario por 30 días en la vivienda del padre de la acusada. Sin embargo, la jueza Dopazo Samper rechazó la petición, argumentando que no se cumplieron los requisitos formales para otorgar dicha medida y que la complejidad del caso justifica un plazo adicional de investigación.
La jueza también destacó el riesgo de fuga y de entorpecimiento del proceso, dado el conocimiento que Silva tiene de los testigos y la gravedad de los cargos en su contra. «Estamos ante hechos graves que, de prosperar, no serían compatibles con una condena de ejecución en suspenso», afirmó.
El caso continúa en desarrollo, mientras la justicia avanza en la recopilación de pruebas para esclarecer uno de los crímenes más impactantes de los últimos tiempos.