El subsecretario de Federico Sturzenegger, Ministro de Desregulación y Transformación del Estado de la Nación, Alejandro Cacace, quedó en el centro de la tormenta política tras declarar que “San Luis necesita más motosierra, es decir, despidos”. Sus palabras generaron un fuerte repudio dentro de la Unión Cívica Radical (UCR) local, donde ya se analiza la posibilidad de expulsarlo del partido por considerar que sus dichos no reflejan los valores del centenario espacio.

Cacace, devenido en lo que algunos radicales llaman un “Radical con Peluca”, supo mantener relaciones políticas fraternales con Alberto Rodríguez Saá, de quien recibió apoyo en distintos momentos, especialmente en lo que fue el acuerdo por la presidencia del Concejo deliberante de la Ciudad de San Luis (ver Nota «Acuerdo Cacace-Tamayo») . Tras concluir su mandato como diputado nacional, consiguió cargos en el Congreso de la Nación y hoy forma parte del gabinete de Javier Milei, como mano derecha de Sturzenegger.

Lo cierto es que hace tiempo que no se lo veía en San Luis y reapareció justo antes de la campaña nacional de octubre, lo que despertó suspicacias en la dirigencia radical provincial, donde pareciera querer colarse en le armado electoral

A la polémica se suma el dato de que su hermano ocupa el cargo de Secretaio de Ambiente en la provincia, «donde además de demostrar ser una familia bastante Casta , pareciera que no ha hecho más que sumar cargos partidarios y acuerdos con empresas vinculadas a trámites medioambientales más que realizar un ajuste» sostuvo un convencional radical.

Desde la UCR puntana señalaron que sus declaraciones resultan ofensivas para cientos de trabajadores estatales, “no podemos avalar expresiones que promuevan la motosierra como única salida”. La situación dejó en evidencia las tensiones internas de un radicalismo que busca redefinir su identidad en San Luis, entre quienes acompañan a Milei y quienes lo rechazan manteniendo los principios históricos del partido.