El Frente de Todos transita, una vez más, un momento de fractura expuesta. A tan solo unos meses de las elecciones presidenciales, se empiezan a calentar los motores y ya se pueden vislumbrar posibles candidaturas e incipientes estrategias desde las distintas terminales oficialistas. Mientras Fernández y su entorno siguen confiados con que el mandatario puede ir por la reelección –dicen que en las encuestas mide bien y hasta lanzan spots de campaña–, otros sectores, como el kirchnerismo, intenta ponerle frenos a esa idea al tiempo que definen qué harán y quiénes serán los que representarán al espacio en una posible interna. Algunas agrupaciones tienen la certeza de que la candidata tiene que ser sí o sí Cristina Fernández de Kirchner, y por eso están planificando un «operativo clamor para levantar la proscripción». Para eso, explican, iniciarán con una marcha el 1° de febrero a las 17 hs en Tribunales. Las dos CTA, la Corriente Federal de los Trabajadores y la organización La Patria es el otro –que lidera Andrés «Cuervo» Larroque y nuclea a varias agrupaciones de base– movilizarán bajo la consiga «Basta de mafia judicial. Defendamos la democracia» sumándose así a la concentración que motorizó el juez Juan María Ramos Padilla.
Desde esa tribu –la que se identifica con la vicepresidenta–, otro posible candidato a presidente es el ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro. Él trabaja en su candidatura desde hace meses, pero su figura no termina de ser lo suficientemente conocida. Por eso, durante la semana pasada el funcionario, que tiene despacho en Casa Rosada –y que ya había protagonizado el mayor estallido del oficialismo cuando presentó su renuncia, en septiembre de 2021, que finalmente nunca se efectivizó– levantó el perfil con una crítica directa al Presidente en un off, para diferenciarse.
Según personas de su entorno, Wado tildó a Fernández como alguien que «no tiene códigos», por no invitarlo a una reunión con el presidente de Brasil, Lula da Silva, y los organismos de derechos humanos, que se hizo el lunes de la semana pasada en Casa Rosada. Esas declaraciones difundidas desde el círculo íntimo del ministro levantaron la furia de los funcionarios más cercanos a Fernández como la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, y del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, que pidieron que Wado aclare si fue él quien dijo eso o, en todo caso, que lo desmienta. De Pedro no hizo ninguna de las dos cosas y desde el gobierno tampoco hicieron nada, porque pedirle la renuncia al alfil de CFK en la Rosada sería un final garantizado para el FDT, que terminaría de explotar por los aires.
Otros sectores más pequeños que La Cámpora, pero que también se identifican con el kirchnerismo, mientras tanto, insisten con que la candidata tiene que ser CFK y que para eso es necesario «levantar su proscripción en las calles». Con ese objetivo, ellos están planificando un «operativo clamor», que todavía no terminan de definir con claridad, que constaría de «pegar afiches en capital y el conurbano», y que se coronaría con «una gran movilización», cercana al 24 de marzo o en la misma fecha. Por lo pronto, arrancarán con una marcha a Tribunales este miércoles. Así lo definieron en un encuentro que tuvieron el viernes en la CTA.
La Cámpora, según dijo su propio líder, Máximo Kirchner, en una entrevista que dio este domingo, también considera que CFK está proscrita y que es necesario cambiar esa condición, pero para él, el responsable de que aquello suceda es Fernández: «Está en sus manos», dijo Kirchner. Además, agregó que «la sociedad argentina buscará y encontrará la manera», de pedir por su candidatura, aunque no especificó de qué modo lo haría.
Uno de los que sí opina que hay que organizar un «operativo», para pedirle a CFK que se presente es el ministro bonaerense, Andrés «Cuervo» Larroque, que sacó de su bio en tw el cargo de «secretario general de la Cámpora», y hasta le habría ofrecido a MK que, si así lo considera, lo reemplace en el puesto. Él decidió crear un nuevo espacio, denominado «La Patria es el otro», donde se nuclean distintas organizaciones de base más pequeñas. Varios miembros de ese espacio consideran que la organización que lidera el hijo de CFK y los dirigentes que la conforman, están más centrados en las discusiones distritales –como es el caso de Mayra Mendoza en Quilmes; Damián Selci, en Hurlingham, etc– que por lo que pasa a nivel nacional y dicen que eso explica por qué no están organizando ellos la movilización social que –dicen– se requiere para que CFK se postule.
Desde las organizaciones que conforman «La patria es el otro», tienen planificado mandar a imprenta para empapelar la provincia y ciudad de Buenos Aires en febrero unos carteles que digan: «¡Proscripción un carajo! Cristina 2023». Como segundo paso tienen pensado movilizar el primero de febrero a Tribunales y después, el 24 de marzo, el día de la Memoria, la Verdad y la Justicia, marchar con una consigna en contra de «la mafia judicial» y a favor de su candidatura. La vicepresidenta fue quien mencionó esa fecha, recuerdan. En el acto de Avellaneda, para finalizar su discurso, dijo: «Es importante que ese día movilicemos con una consigna: Argentina y democracia sin mafias, nos lo merecemos».
«Nosotros pensamos que no puede haber modelo democrático con la principal dirigente de la argentina proscrita, entonces empezamos una campaña para romper la proscripción. El 24 tiene que ser contundente y multitudinario», aseguró Lauro Grande, uno de los organizadores. Eduardo Montes, referente de la Federación de Trabajadores de la Economía Social, expresó que la proscripción de CFK «no se puede aceptar porque es aceptar la proscripción del peronismo. Por eso, tomamos el bastón de mariscal y seguiremos en esta lucha«. Esas voces se sumaron a la del jefe de gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, que dijo que «no se puede pensar en candidaturas hasta no romper la proscripción a Cristina», y a la de Larroque que le pidió a la militancia que salga del «estado de letargo».
Dentro del espacio que lidera Larroque hay unas 20 organizaciones políticas y sindicales, entre ellas, la Corriente Lealtad, Martín Fierro, Descamisados, la Corriente 13 de abril, el Frente Social Peronista. «La consigna es romper la proscripción con una gran campaña militante: con pintadas, con notas en los medios, con mucha concientización. El 24 de marzo sería un momento importante para unificar a la militancia y que después esa militancia se ponga a trabajar para concientizar a la sociedad», detallaron.
Desde otro de los sectores, también tiene ganas de competir el actual embajador en Brasil, Daniel Scioli, aunque aclara que lo hará si Fernández finalmente define no ir por la reelección. El que aún no da señales explícitas de sus intenciones es el ministro de Economía, Sergio Massa, que tiene altas posibilidades de ser el candidato del peronismo. Su futuro y su candidatura dependerán de los resultados que logre en la cartera que conduce. De eso, a decir verdad, dependerá el futuro de todos los que quieran jugar dentro del espacio.