San Luis (LaNoticia) 06-11-2020. El Gobierno del Alberto Rodríguez Saá, es de las gestiones menos transparentes del país, no solo con cuestiones de finanzas, también con la comunicación y las solicitudes de información.
Los empleados del área de prensa, son el primer filtro para acceder a entrevistas con funcionarios o datos oficiales, simplemente, se hacen los sotas, para no usar la típica frase argentina. Una de las cuestiones que levantaron polémica en el país, es que Alberto Rodríguez Saá es uno de los gobernadores que no da a conocer su declaración jurada.
Luego vienen los diputados y senadores, sobre todos los adictos al poder oficial, son quienes se encargan de frenar todo tipo de pedidos de informe, que solamente salen de la oposición, la única función que tienen los diputados oficialistas es hacer beneplácitos “festejando” hasta el color de los zapatos del gobernador.
A veces con aliados como Bartolo Abdala, Ricardo Chávez, Mario Alume o mercedinos por el Cambio, bloquean constantemente los pedidos de informe, principalmente los que tiene que ver con políticas públicas, o la bendita pauta oficial. El Gobierno de Alberto Rodríguez Saá había presupuestado para el 2019, $190 millones en gasto de pauta oficial; sin embargo, ese monto prácticamente se quintuplicó y alcanzó los $850 millones. Se buscaba conocer el marco legal al que se somete el Gobierno, para adjudicar los recursos para publicidad; también un registro de titulares de medios de comunicación audiovisuales, que participan de la pauta. Pero el oficialismo no quiere darlo a conocer.
Otra muestra de falta de transparencia, son las reiteradas faltas de la Jefa de Gabinete, Natalia Zabala Chacur cumplir con los informes mensuales en la Legislatura, que en lo que van del año, solo participó dos veces, una en cada Cámara, cuando tendría que haber brindado los informes al menos cuatro veces.
