San Luis (LaNoticia) 09-03-15. Un puñado de diputados radicales ha estado haciendo, hace una semana aproximadamente, diligencias para que se les otorgue a los Diputados un aumento en sus dietas del 35 %, tal como se le ha dado a la administración pública. Pero los muchachos que enarbolan las banderas de supuestas igualdades hacia los más humildes, solicitaron que ese aumento se dé en una sola etapa y no en tres como a los empleados dependientes del gobierno provincial.
La información se la dio a La Noticia `el Stiusso puntano´, un hombre dedicado a meterse donde nadie lo ve para sacar datos más que interesantes. Este espía secreto nos aseguró que, inclusive, uno de esos radicales habló con la presidente de la Cámara de Diputados, `Chela´ -Chelita para los íntimos- Mazzarino, para proponerle el tema que está íntimamente vinculado a la justicia social.
Según nuestro espía, este grupo de diputados radicales, apurados por la grave situación económica y sus bajas dietas, lanzó entre ellos la idea de pedir el aumento, ante lo que uno de ellos, señaló que para hablar de aumentos de dietas, debían hacerlo con doña Chela.
A los pocos días -en los primeros días de marzo, según `el Stiusso puntano´- uno de ellos, con gran euforia, le informó al resto que había hablado del tema con doña Chela y que ésta le había dejado la puerta abierta al pedido, asegurándole que lo iban a tratar.
El espía ingresó en la sala de Contaduría de la Cámara de Diputados, para enterarse de cuánto ganan como para estar preocupados por un supuesto “retraso en sus dietas”, y descubrió que el representante del pueblo que menos antigüedad tiene, y por lo tanto que menos cobra, tiene una dieta de 25.000 pesos, a lo que hay que sumarle una cifra idéntica para “gastos de empleados”, la que no es obligatoria gastar en empleados precisamente, con lo cual -según don Stiusso local- muchos de los diputados casi cobran enteritos los, por lo menos, 50.000. “Mirá -nos dijo-, con la famosa ley de Alberto que le daba a los diputados y senadores doble dieta para que fueran ellos, y no el Estado, quien bancara a los empleados, la mayoría ñoquis, hoy los legisladores cobran el doble de su dieta y si quieren tienen empleados y si no quieren se guardan todito para ellos”.
Pero suponiendo que los muchachos que representan a un pueblo que tiene sueldos elevadísimos -en muchos de los casos apenas si llegan a los $ 7.000-, cobraran solamente $ 25.000 -o más, en los casos en que ya son casi diputados eternos- de dieta y repartieran los otros $ 25.000 -o más, en los casos enunciados en las líneas anteriores-, ¿No es una tomada de pelo al trabajador pretender elevar sus dietas a $ 33.750, más $ 33.750 para formar parte de sus ingresos si no contratan a nadie?
Muchachos radicales, creemos que esto se va a transformar en un verdadero escándalo y más en un año electoral, porque les preguntamos: en campaña ¿Con qué cara van a mirar a los trabajadores para decirles que quieren el voto para trabajar por ellos? ¿Quién les va a creer? En lugar de andar pensando en pedir semejante aumento con semejantes dietas, ¿No deberían ir pensando en renunciar porque, claramente, ustedes no son dignos representantes del pueblo trabajador?
Carlos Rubén Capella
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