Los cinco gremios nacionales y autoridades del Ministerio de Educación analizan un eventual acuerdo salarial que elevaría a 8.500 pesos el sueldo básico para los maestros, lo cual representaría un aumento del 40 por ciento, la cifra que había intentado ser disminuida por Mauricio Macri.
El gobierno nacional convocó a los sindicatos que discutieron la paritaria federal docente a partir de las 12:00 en la cartera laboral para determinar el piso de referencia en la mejora de los haberes. El encuentro pasó a un cuarto intermedio desde las 14:40.
La oferta anunciada por Bullrich consistía en un aumento del 40,1 por ciento en dos cuotas para el sueldo del maestro que inicia su carrera, que hoy es de 6.060 pesos. Ese sueldo, que lo cobra sólo un 8 por ciento de los docentes y en pocas provincias, pasaría a 7.800 pesos a partir de febrero y llegaría a 8.500 pesos a partir del 1º de julio. En ambos tramos del aumento está incluida una mejora del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), que paga la Nación: 300 pesos en la primera cuota y 500 en la segunda.
Si el Gobierno confirma esa oferta, que había sido bien recibida por los gremios docentes, se comenzaría a cumplir con la Ley de Financiamiento Educativo, que establece que primero se fija el salario inicial nacional y luego se acuerda el resto de los sueldos de las provincias. Algo que desde la semana pasada el Gobierno pretendía hacer al revés.