El economista Arnaldo Bocco aseguró que la decisión del juez federal de Nueva York Thomas Griesa de declarar inembargables los activos diplomáticos y militares de la Argentina en los Estados Unidos, además de incluir en los mismos a patrimonios de YPF, el Banco Central y Enarsa, responde al hecho de que el magistrado «comenzó a entender que no puede trabajar de forma excluyente para los fondos buitre».
Bocco adjudicó el cambio de postura de Griesa a la decisión de la Organización de Naciones Unidas (ONU) de avanzar con la aprobación de nueve principios, que buscan frenar el accionar de fondos buitre en procesos de reestructuración de deuda.
También lo vinculó al fallo de la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York a favor de Argentina en el caso de los «me too», que revirtió la decisión de Griesa, que había favorecido el pedido de los tenedores de bonos para ser considerados dentro de su fallo y demandar al país, al tiempo que reprendió al magistrado por no seguir las órdenes dadas anteriormente sobre cómo proseguir.
«Se creó un plataforma legal a partir de la decisión de la ONU, y no se está lejos de que sean censurados los fondos buitre, con lo cual a jueces como Griesa se les genera un escenario complejo», destacó Bocco, en tanto que estimó que «habrá otros fallos similares al de la Corte de Apelaciones, en la medida que Griesa u otro magistrado tome posiciones irreductibles».
A su criterio, tras estos episodios «Griesa está entendiendo que no puede trabajar de manera excluyente para los buitres y en contra de la Argentina», y remarcó que «cualquier persona con sentido común, determina que este Juzgado está siendo parte, y no un mediador en el conflicto».
Asimismo, evaluó que el juez «ante el escenario de cercanía de fin de año, está preparando las condiciones para que las partes se puedan sentar más adelante a negociar».
Al respecto, opinó que «Argentina tiene que negociar con mucha dureza, no pagar cualquier cosa, sino lo racional para los canjes anteriores», y puntualizó que «la Ley Cerrojo es muy contundente en cuanto a que el país está autorizado a cumplir con las condiciones de la última negociación, que fue canje de deuda de 2010».