El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) pidieron a los acreedores bilaterales de los países más pobres que aplacen los cobros de deuda, para que estas naciones puedan tener liquidez ante la pandemia del coronavirus.
Las dos organizaciones internacionales solicitaron a todos los tenedores bilaterales oficiales que suspendan los pagos de la deuda de los países más pobres del mundo, una medida que sólo sería temporal mientras dure la pandemia.
Las dos organizaciones internacionales, férreas en la gestión de pagos de deuda, consideraron que es imperativo en este momento dar un sentido global de alivio a los países en desarrollo así como una fuerte señal a los mercados financieros.
La petición ya fue formulada a los países pertenecientes al Grupo de los 20 (G20) por parte del presidente del BM, David Malpass, y ahora se extiende a todos los «acreedores bilaterales».
En un comunicado conjunto, pidieron al Grupo de los 20 (G20) que se pongan a cargo de esta tarea de evaluación para hacer la lista de países con una deuda insostenible, y trabajar en una reestructuración.
Ambas instituciones consideraron que esta medida permitiría analizar la situación y necesidades de cada país.
El pedido apunta a países que califican para ayuda del «IDA», un fondo destinado a los «dos tercios de la población mundial en extrema pobreza».
La Asociación Internacional de Fomento (IDA, por sus siglas en inglés) es una entidad que forma parte del Banco Mundial y agrupa a los países más pobres del planeta, en los cuales se concentra el 66 por ciento de la población mundial que vive en situación de extrema pobreza.,
Aplazar la deuda también «permitirá realizar una valoración del impacto de la crisis y las necesidades de financiación de cada país, indicaron.