Yésica Bloom quería mejorar su imagen corporal tonificando sus glúteos. La silicona industrial es una sustancia que se usa para los vehículos y está prohibida su aplicación en seres humanos.
Un transexual de 23 años, de gran exposición en las redes sociales donde subía sus fotografías y era conocido como «Yésica Bloom», murió en San Juan tras inyectarse silicona industrial para retocarse estéticamente su cuerpo.
Si bien desde el Hospital Rawson donde estuvo internada desde el domingo pasado no hicieron declaraciones oficiales, el entorno de Yésica dijo que había buscado hacerse unos «retoques» en los glúteos.
La silicona industrial es una sustancia que se usa para los vehículos y está prohibida su aplicación en seres humanos, pero, según los especialistas, es usual que se use de manera clandestina para aumentar labios, entre otras partes del cuerpo.
Según Diariodecuyo.com.ar, el pasado 30 de abril, Yésica, oriunda de Rawson, publicó en el muro de Facebook que había llegado a San Juan para ver a su familia y amigas.
«Me compré muchas cosas lindas. Hice muchos regalos. Mañana, otra meta cumplida en mi vida lograda con mi esfuerzo… colitaaaa nuevaa… sólo para entendidas/os je besos», publicó Yésica en su red social.
Según contó una de sus amigas, que quiso preservar su identidad, ésta le confesó haberse colocado, el pasado 1 de mayo, silicona industrial (alogenosis iatrogénica) para darle más tonicidad a sus glúteos.
Pero al día siguiente comenzó a sentirse mal. Primero tuvo tos y durante la madrugada del domingo empezó a tener fiebre. Como seguía sintiéndose mal de salud, cerca de las 16:00, decidió ir al hospital donde quedó internada, según declaró la amiga.
El lunes, su estado se agravó y el martes falleció pasadas las 11:30.
«Cuando Yésica empezó a sentirse mal, le preguntamos qué le pasaba realmente. Ahí fue cuando nos dijo que se había hecho unos retoques pero no nos dijo en qué parte del cuerpo», dijo la amiga en cuya casa se albergaba Yésica.
Yésica Bloom ya se había realizado implantes en los senos, en los glúteos, y labios, para lograr apariencia femenina bien definida.
Era de contextura delgada y desde hacía seis años era trabajadora sexual, según contó su amiga, por lo que para mejorar su imagen había decidido retocarse el cuerpo.
Según su amiga, desde hace bastante no tenía contacto con su familia porque no aceptaban su condición sexual. Los familiares no quisieron tener contacto con los medios, pero los amigos se manifestaron por la red social Facebook.
La conmoción en la comunidad trans fue tal que salieron a alertar sobre la peligrosidad de colocarse sustancias sin previo asesoramiento médico, algo que según admitieron «es normal que suceda».