El padre del joven habló desde su casa en el barrio Nahuel Hue, donde fueron velados los restos de Rafael. “Que el juez se ponga en el lugar de la familia y que el asesino pague. Ya se sabe que fue la policía”, apuntó el padre en referencia al Grupo Albatros.
Alejandro Nahuel contó que su hijo «hace poco» que participaba de los reclamos de la comunidad Lafken Winkul Mapu, tal como lo habían relatado anteriormente los referentes de las organizaciones barriales a las que el joven de 22 años iba periódicamente para aprender un oficio y colaborar con sus vecinos.
«Él iba a ayudar nomás», indicó el padre de Rafael en referencia al reclamo de tierras que llevaba adelante la comunidad desde el 14 de septiembre en la zona del Lago Mascardi hasta el jueves pasado cuando un operativo comandado por el Ministerio de Seguridad decidió cumplir con violencia la orden de desalojo ordenada por el juez Gustavo Villanueva. «Ser mapuche o no, no es para que te quiten la vida. No pueden matar a un joven por la tierra”, lamentó Alejandro Nahuel.
«Recién a las 10 (de la noche) nos enteramos que era mi hijo y hoy (por ayer) sabemos que fue una bala”, recordó el padre del joven sobre la noche del sábado, cuando un grupo de la Prefectura Naval reprimió al grupo de mapuches que habían permanecido escondidos en la montaña desde la represión del jueves, en el que también quedaron otros dos integrantes de la comunidad heridos de bala.
“El responsable debe pagar. Si hay que bajar al centro, vamos a bajar. Esto no queda acá y llegaremos hasta donde sea para que el que lo hizo pague”, aseguró Nahuel.