La Unión Industrial Argentina cuestionó hoy los beneficios para que los importadores traigan productos del exterior.
Cuestionaron así el no cobro de IVA adicional y del impuesto a las ganancias al que eran sujetas las importaciones.
Además, a raíz del anuncio sobre los beneficios para importadores de productos terminados, los representantes manifestaron su preocupación por lo que consideran un trato desigual para la industria.
Mientras los productores nacionales deben pagar en 4 cuotas mensuales y con impuesto PAIS los insumos necesarios para la fabricación, los importadores de bienes terminados estarán exentos de impuestos y tendrán acceso total a las divisas necesarias en un solo pago a 30 días.
“El anuncio realizado hoy afecta seriamente la competitividad de las empresas que operan, producen y emplean en el país”, señaló la UIA.
En un encuentro, los representantes sectoriales y regionales analizaron la dinámica industrial durante los primeros dos meses de 2024.
La caída del mercado interno y el impacto del crecimiento de los costos fueron algunos de los temas planteados. Se marcó la necesidad de desarrollar nuevos instrumentos de política industrial (líneas de financiamiento, medidas tributarias, laborales, entre otras), junto con acciones para amortiguar el impacto en las pymes y en las economías regionales ante un escenario recesivo.
Se destacó la importancia de generar una pronta recuperación del nivel de actividad para lograr las metas fiscales, monetarias y cambiarias sosteniendo el nivel de empleo y producción.
Los representantes sectoriales y regionales manifestaron además su apoyo a la modernización de la legislación laboral vigente para adaptarse a las nuevas realidades laborales, de acuerdo con el Libro Blanco de la UIA.
Por otra parte, el Centro de Estudios UIA presentó los indicadores de actividad industrial del mes de enero y los resultados de la primera Encuesta de 2024, que alcanzó a más de 700 empresas.
Los datos relevados muestran una coyuntura de fuerte contracción producto de la corrección cambiaria ante la falta de reservas y la acumulación de los desequilibrios macroeconómicos durante el 2023.
Durante ese mismo período se acumuló una importante deuda comercial y se incrementaron las restricciones para la importación de insumos críticos para la producción.
En este contexto, el Monitor de Desempeño Industrial (MDI) -que adelanta el ciclo de actividad industrial- volvió a situarse en zona de contracción por séptima vez consecutiva.