En esta semana de festejos, especialmente para la juventud, Clases de Manejo “San José” Obrero te propone que reflexiones acerca de los efectos nocivos del alcohol y sus consecuencias destructivas, entre las cuales la violencia en el tránsito ocupa un lugar tristemente predominante, para que puedas visualizar alternativas de disfrute en grupo, sin alcohol y con seguridad.
¿Sabías que el alcohol afecta más a los jóvenes que a los adultos? Los jóvenes menores de 17 años, tienen menos enzimas metabolizadoras del alcohol en el hígado, por lo que la intoxicación resulta más fuerte y dura más tiempo. Su cerebro está en formación y el consumo de alcohol en gran cantidad, en forma reiterada, puede ocasionar daños irreversibles en áreas claves, como las que regulan la atención, la memoria y por ende la capacidad de aprendizaje.
Cuando los consultamos, muchos jóvenes reconocieron que no les gusta beber, pero lo hacen igual para no ser excluidos de su grupo. Y muchos jóvenes beben grandes cantidades de alcohol para intentar encubrir sus problemas personales y reducir la angustia, el cansancio, la tensión y las inseguridades internas, muchas propias de la edad.
Pero en realidad, para divertirse no es necesario estar alcoholizado. ¡Cuidá tu vida y la de los demás! Los siniestros de tránsito son un riesgo muy serio para la vida de los jóvenes.
En su portal de la red social Facebook, la organización Luchemos por la Vida publicó un mensaje contundente: «Que disfrutes el Día de la Primavera. Pero tené en cuenta que el consumo de alcohol puede hacer que mates a alguien, o que te mates, conduciendo». La advertencia se apoya en datos estadísticos certeros, porque el consumo de alcohol está presente en más del 50 % de los siniestros viales con muertos o heridos.
La licenciada María Cristina Isoba, directora de investigaciones de la asociación, explicó que «lamentablemente la llegada de la primavera es motivo de un crecimiento de hechos dramáticos, porque los chicos y jóvenes consumen alcohol en sus encuentros, como parte de ritos culturales muy arraigados, y posteriormente llegan las consecuencias».
«En más de la mitad de los siniestros viales con muertos o heridos registrados en Argentina está presente el alcohol en las víctimas o en conductores que provocan muertes. Esto hay que decirlo, repetirlo, todas las veces que se pueda. La población debe entender que cuando consume alcohol sus facultades resultan afectadas, y manejar requiere de muchísimas variables», señaló la experta.
En ese marco, Isoba continuó manifestando que «al analizar la problemática entre los jóvenes, la sospecha es que resulta más alta la incidencia de alcohol», precisando que «de hecho el 54 % de los muertos en hechos viales son personas menores de 35 años».
«Los jóvenes representan un segmento de la población en riesgo. Mueren más jóvenes por episodios de siniestros viales que por cualquier otra causa en el país. Mientras, el consumo de alcohol es cada vez más intenso entre los jóvenes en los últimos años. No es un fenómeno nuevo, sino que viene de larga data. Algunos expertos mencionan que el abuso en el consumo de alcohol es tan profundo que buscan efectos tóxicos agudos, incluso perder la conciencia», dijo Isoba.
De acuerdo a los estudios de Luchemos por la Vida, el año pasado fallecieron 7.896 personas en hechos viales, con un promedio de un muerto cada 65 minutos. La estadística afirma, también, que en el 47 % de los hechos las víctimas mortales viajaban en autos, el 11 % en camionetas, el 7 % en micros y combis, el 26 % en motocicletas y 9 % en otros.
«Del total de muertos, el 27 % tenía entre 13 y 25 años. En esa franja se encuentra la mayor cantidad de hechos donde la incidencia del consumo de alcohol es protagonista. Los jóvenes tienen menores enzimas metabolizadoras en el hígado, que está en pleno desarrollo. Por eso, el alcohol tarda más en resultar eliminado del cuerpo, entonces el efecto de toxicidad se mantiene por más tiempo», explicó Isoba.
Asimismo, la experta señaló que «el alcohol afecta el sistema nervioso central, y lógicamente esto tiene una incidencia directa al momento de conducir vehículos, aún en dosis relativamente bajas», destacando que «durante la conducción se deben tomar decisiones en microsegundos, y todo el tiempo, por lo que al tener la capacidad de reacción disminuida sube la posibilidad de que ocurran siniestros viales».
Fuente: Diario Popular