La niñera de origen asiático, Guiulchejra Bobokulova, fue detenida por la policía, luego de asesinar a la niña de 4 años de edad, decapitarla e incendiar el hogar de la menor.
Las calles de Moscú (capital de Rusia) se llenaron de horror, cuando una mujer vestida de negro decidió salir a pasear por el noreste de la ciudad, con la cabeza de una niña decapitada.
Al conocerse la noticia, la policía de Moscú debió cerrar una estación del metro de la ciudad, ante el temor de un posible ataque terrorista.
Según los informes, la mujer gritaba `Allahu Akbar´ (`Dios es grande´ en árabe) y «soy una terrorista» y amenazaba con inmolarse, aunque, según las últimas informaciones, no portaba explosivos.
A tempranas horas de este lunes, la Policía había encontrado el cuerpo sin cabeza de una niña, tras extinguirse un fuego causado por un incendio en un bloque de apartamentos de Moscú, ubicado en la calle Narodnogo Opolcheniya.
Según la agencia Interfax, la niña, identificada como Nastya, tenía cuatro años de edad.
El Comité de Investigación de Rusia abrió una investigación con relación al asesinato de la menor. De acuerdo con los primeros datos aportados por la fuerza policial, la niñera esperó que los padres abandonaran el apartamento con el hijo mayor y cometió el asesinato de la menor, provocó un incendio en el apartamento y salió del lugar.
Tras aterrorizar a Moscú, la niñera de nombre Guiulchejra Bobokulova, oriunda de Asia Central, declaró a los agentes policiales que la razón del asesinato se debe a una infidelidad de su marido, aunque se desconoce la relación que tiene su marido con la familia para la que trabajaba.
Fuente TeleSUR