San Luis (LaNoticia) 17-12-15. La orden del juez llegó a media mañana y a partir de ese momento hubo momentos críticos.
Si bien la mayoría de las familias que habían usurpado 36 viviendas de un barrio que iba a ser entregado por la gestión Ponce en cercanías del Néstor Kirchner, decidieron salir pacíficamente del lugar, otras se negaban a hacerlo argumentando que no tenían a dónde ir.
La orden del juez sostenía que había que desalojar por las buenas o por las malas, y ante la imposibilidad de estas familias de llevar sus pocas pertenencias a algún lugar físico, las autoridades municipales les ofrecieron llevarlas al corralón municipal y quedar como depositario judicial, pero la idea no tuvo buena recepción en los usurpadores quienes temían que si sus pertenencias llegaban al corralón, nada ni nadie les aseguraba que las recuperarían.
Así las cosas y para cumplir con la orden del juez lo más rápidamente posible, salió a la luz la nada brillante idea de dejar los muebles tirados en la calle fuera del predio donde se construyen las viviendas. Fue un oficial de policía a cargo del operativo el que se puso firme y dijo que no iba a permitir algo así, tras lo que se decidió finalmente llevar los muebles al corralón municipal. Los primeros camiones cargados de muebles comenzaron a salir del predio sobre el mediodía.
Carlos Rubén Capella
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