San Luis (LaNoticia) 03-07-15. El intendente de la Ciudad de San Luis, Enrique Ponce, firmó ayer con la empresa IKAU SA, el contrato de inicio de obra de los desagües pluviales. “A partir del inicio de esta obra histórica demostramos que la palabra empeñada no fue en vano, porque esta es una obra esperada por todos y tenemos la felicidad de haber sido nosotros quienes la hemos podido concretar. A partir de la firma del decreto homologando y del acta de inicio de obra, en los próximos ocho meses se dará cumplimiento a la construcción de los desagües pluviales tan esperados por los vecinos”, dijo el intendente.
«Hemos tenido tantos obstáculos y tantas piedras en el camino pero esta noticia es tan buena que no vale la pena mencionarlos, solo podemos decir con orgullo que los superamos. Así como nos abocamos a dar solución a los problemas que por décadas tuvo la Ciudad de San Luis, el tema del agua, de las cloacas y de los desagües pluviales siempre fueron nuestro principal motivo de preocupación desde el inicio de nuestra gestión. Creo que todos los intendentes que pasaron representaron distintos modelos de gestión, de compromisos y de apoyos, pero ha quedado claro que a lo largo de estos casi cuatro años vamos a superar los mil millones de pesos, los cuales han sido destinados a proveer mejores condiciones de desarrollo para todos los vecinos», aseguró Ponce.
Por su parte Ramón Zarrabeitia, secretario de Servicios Públicos, dijo que “durante la gestión de Carlos Ponce se hizo un estudio de cuencas que permitió determinar el sistema que debería tener la ciudad para evitar tener los perjuicios que generan las lluvias intensas de verano. Dentro de ese sistema, una de las obras importantes es el colector de Avenida Perón, que es el que vamos a realizar a partir de la firma de este contrato de obra. El colector es un gran canal, trabaja sin presión, tiene una cobertura superior para evitar el ingreso de elementos perjudiciales que permite la vida normal de la arteria”, describió Zarrabeitia.
“El desagüe es un gran caño al que se le agregan cámaras para poder acceder al mismo en cada esquina y elementos que captan el agua, sumideros o bocas de tormentas para que el agua no siga el curso por las calles de este a oeste. El canal termina en el Río San Luis con una obra disipadora de la energía hidráulica que produce el agua y que se hace con estructuras de malla metálica con piedras adentro, lo cual constituye una contextura flexible. Estas estructuras tienen como objeto evitar una retroerosión sobre el conducto y no afectar la zona de descarga del canal”, concluyó el secretario de Servicios Públicos.
Carlos Rubén Capella
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