Los prestamistas insisten en que se realicen mayores recortes en los gastos públicos, por lo que rechazaron las medidas propuestas por la nación helena.
El primer ministro griego, Alexis Tsipras, rechazó la contrapropuesta de sus acreedores que implica subir el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y recortes presupuestarios a la inversión social.
Antes de su partida a Bruselas este miércoles, el primer ministro señaló el comportamiento de sus acreedores como «extraño» debido a que «parece indicar que no quieren un acuerdo o quieren servir a intereses específicos».
«Tal reiterado rechazo a medidas equivalentes nunca ha ocurrido antes: ni en el caso de Irlanda, ni de Portugal», escribió el gobernante griego en su cuenta de Twitter.
La contrapropuesta fue presentada luego de que los acreedores rechazaron las medidas de compensación más recientes de Grecia, con el objetivo de incrementar los ingresos para cumplir con metas presupuestarias, entre ellas una serie de alzas de impuestos y de las contribuciones de las pensiones.
Pese a esto, la CE, el BCE y el FMI insisten en demandar más recortes en los gastos y el alza de impuestos.
Mientras tanto, al llegar a la reunión de Bruselas, el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, precisó que «aún falta trabajo» entre el país heleno y sus acreedores.
En entrevista con TeleSUR, el economista Enrique Casais recordó que la crisis social que afecta hoy la zona euro ha sido favorecida por las políticas neoliberales impuestas desde los años ´90. Asimismo, apuntó que el FMI es el brazo financiero de Estados Unidos que, desde la Unión Europea, quiere ejercer el control de la región.
Fuente TeleSUR