Uno de los elementos del aparato represivo que operó en el país en los años 70, fue la Alianza Anticomunista Argentina, conocida como Triple A, un grupo paramilitar y terrorista de extrema derecha que lideró el ministro de Bienestar Social, José López Rega, concebida para exterminar los elementos marxistas
Esta temible organización también extendió su estructura en Santiago del Estero. En los testimonios de ex presos políticos y los relatos de víctimas e indagatorias de imputados, durante los juicios por delitos de lesa humanidad en la Justicia Federal santiagueña, se mencionaron al menos a dos miembros de esta organización.
Fuentes judiciales, indicaron que desde la Fiscalía Federal General y la Unidad Fiscal de Delitos de Lesa Humanidad, se tiene ubicado a uno de ellos viviendo en otra provincia y que también se ha solicitado que se arbitren las medidas para lograr su detención.
Se desconocía su paradero, pero el Ministerio Público Fiscal logró ubicarlo y ahora procura su detención para que responda por su participación en delitos de lesa humanidad, en Santiago del Estero.
De acuerdo con relatos de sobrevivientes al terrorismo de Estado, esta persona fue un «verdugo» encargado de someter a sesiones de torturas a los presos políticos. También es mencionado en un caso, como el responsable del secuestro de un joven estudiante universitario.
De las constancias de los juicios y las investigaciones, surgen que estos dos elementos habrían llegado desde Buenos Aires a Santiago del Estero meses previos al golpe, recomendados por la ex Side.
Uno de ellos cumplió funciones de guardaespaldas en Casa de Gobierno. Se trata de José Marino, quien luego murió, abatido en un operativo policial en extrañas circunstancias, cuando ya gobernaban los militares.
Uno de los hechos llamativos sobre esta persona, mencionada en varios casos, es que vivía con su familia, incluidos sus hijos, en lo que fue la sede del Departamento de Informaciones Policiales (DIP) o ex «Side» en esta capital.