Un grupo de ONGs presentaron un amparo por la falta de agua en las villas de la Ciudad de Buenos Aires, en pleno aislamiento social obligatorio. Las entidades pidieron medidas de saneamiento y de acceso al agua potable para evitar mayores casos de transmisión del coronavirus y también del dengue, cuyo crecimiento en el sur de la Ciudad es exponencial. Desde el bloque del Frente de Todos en la Legislatura presentaron distintas propuestas para que el gobierno porteño atienda la situación en las villas durante la cuarentena, desde la instalación de cajeros automáticos hasta medidas para sanear espacios comunes, que son utilizados inevitablemente por los habitantes.
La demanda por el acceso al agua en las villas fue presentada por el Observatorio de Derecho a la Ciudad (ODC), por el dirigente de la CTA-Capital Pablo Spataro, por la Cátedra de Ingeniería Comunitaria, el Frente Territorial Salvador Herrera y por el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas, que conduce Claudio Lozano. Además, se sumaron referentes de barrios populares como la villa 21-24, la 15, la 20, el barrio Cildañez, Inta y Scapino. El amparo recayó en el juzgado de Osvaldo Otheguy, quien le pidió al gobierno porteño que conteste a la demanda y deberá resolver en los próximos días los pedidos de las organizaciones.
La demanda colectiva reclama que se garanticen una serie de medidas básicas para el acceso al agua potable y el saneamiento en las villas, en plena pandemia del coronavirus y con un crecimiento del dengue, sobre todo en la zona sur de la Ciudad. En el escrito remarcaron que los barrios no tienen agua potable y que muchas veces las aguas que consumen o usan para higienizarse están mezcladas con otras cloacales, lo que imposibilita cualquier prevención de la enfermedad. También recuerdan que las familias se ven forzadas a almacenar agua en tachos, lo que acrecienta la proliferación de mosquitos y del dengue.
Como remedio a esta situación, pidieron que el gobierno de Rodríguez Larreta haga un diagnóstico participativo durante noventa días y elabore un plan de agua potable y saneamiento cloacal, que tenga en cuenta a las comunidades locales para la contratación de las obras. Reclamaron que se avance en garantizar que los hogares tengan un baño completo.
Mientras se resuelve el problema de fondo, y en el marco de la crisis, también pidieron al juez una cautelar para que el gobierno porteño garantice por habitante dos litros de agua potable por día, así como la entrega de agua en los barrios donde no haya suministro de agua potable. También reclamaronque la Ciudad entregue dos garrafas de 10 kilos, ocho litros de lavandina, jabón blanco en pan y detergente para garantizar la higiene. Por último, solicitaron que monitoreen la calidad del agua en los barrios populares y se limpien de manera periódica los tanques cisterna.
Propuestas sanitarias
Además de esta acción judicial, promovida por distintas ONGs, los legisladores del Frente de Todos presentaron una serie de propuestas para atender la situación sanitaria en las villas, donde viven 73 mil familias. Los diputados y diputadas recordaron “las dificultades que tienen estas familias para llevar adelante el aislamiento social debido a las condiciones habitacionales y de hacinamiento que sufren y para resolver las necesidades financieras y de alimentación”. “No hay cajeros automáticos y hay que caminar mucho para extraer dinero, los supermercados están lejos y los negocios de proximidad están desabastecidos o no permiten comprar con tarjeta de débito. El acceso al agua es problemático y muchas familias dependen de los comedores comunitarios para subsistir”, advirtieron.
Los legisladores propusieron que se desinfecten espacios comunes, que se les den unidades móviles a los centros de salud para trasladar a casos sospechosos de coronavirus, además de diseñar un protocolo para los casos que son confirmados como positivos.
Además, plantearon que se deberían crear Comités de Emergencia Sanitaria, Social y Económica de barrios populares. Esto último es un proyecto del legislador Javier Andrade, quien planteó: «Esto va a fortalecer el rol del Estado presente en el contexto de emergencia en el acceso a las herramientas sanitarias para enfrentar esta pandemia, para proteger las economías familiares más vulnerables en su situación económica, proveer alimentos y elementos de limpieza y desinfección donde sean necesarios y reforzar con acciones concretas para la intervención en situaciones de violencia de género».
Desde el bloque también advirtieron que tiene que haber protocolos para las fuerzas de seguridad que permitan y ordenen el traslado a comedores comunitarios y para que «las ferias de alimentación no constituyan un foco de contagio». Además, instaron al gobierno porteño a instalar cajeros automáticos móviles y fijos, para que las personas no tengan que trasladarse una gran cantidad de cuadras para acceder al dinero en efectivo.
En línea con la demanda judicial, los legisladores plantearon una serie de medidas destinadas al “descacharreo y desinfección de dengue para el Ministerio de Espacio Público, una cuestión de relevancia que afecta a miles de porteños” y que viene quedando solapada por la crisis del coronavirus.