Jorge Glas regresó este jueves a la cárcel de Latacunga, donde cumple una condena de seis años condenado por asociación ilícita.
A través de un comunicado, el Gobierno de Lenín Moreno señala que «no puede hacerse responsable si él o cualquiera de los procesados se infringen daños personales».
El Gobierno de Ecuador, dirigido por Lenín Moreno, se desmarcó de la responsabilidad por la salud del ex vicepresidente Jorge Glas, quien cumple este jueves 19 días en huelga de hambre en rechazo a lo que ha denunciado como una injusta prisión por supuesta asociación ilícita.
El Gobierno de Moreno afirma que «no puede hacerse responsable si él (Glas) o cualquiera de los procesados se infringen daños personales».
El comunicado difundido por el Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos ecuatoriano indica que el estado del ex vicepresidente es su responsabilidad «propia y exclusiva» y «de las personas que desde el exterior y en el país incitan actitudes agresivas».
El ex vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, que sigue en huelga de hambre, fue trasladado de urgencia el pasado miércoles en horas de la madrugada desde su prisión en Latacunga a un hospital de Quito por problemas de salud.
«Soy un preso político. Por el odio sin límites me han trasladado de cárcel sin motivo, solo por humillarme, solo por venganza. Mi vida corre peligro», denunció el 22 de octubre por Twitter el ex vicepresidente elegido como compañero de fórmula del presidente Moreno.
Por su parte, el ex presidente de Ecuador Rafael Correa, la defensa de Glas y movimientos sociales en Ecuador responsabilizan al actual Gobierno de la salud del político, que este jueves regresó a la cárcel Latacunga.