YPF ejecutó el esperado aumento en los precios de combustible en todo el país: la nafta súper subió 2,2 por ciento y la Infinia (premium) 1,7 por ciento; el diésel avanzó 3,7 por ciento y el Infinia diésel, 3,5 por ciento. Los combustibles aumentaron ya 14 veces en lo que va del año.
El presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles y Afines del Centro de la República, Gabriel Bornoroni, aseguró que la nafta «debería aumentar un 9 por ciento más» al argumentar que todavía hay un atraso en el precio. Bornoroni aclaró que las estaciones de servicio son «meras intermediarias» entre la petrolera, que define los precios que deben regir en los surtidores, y el consumidor final.
El aumento en los precios de combustibles, que ya acumula una suba del 70 por ciento en lo que va del año, afecta especialmente a las provincias del nordeste, la región más pobre del país. En Corrientes, por ejemplo, el litro de nafta súper subió esta mañana hasta los 45,09 pesos, mientras que la premium alcanzó los 50,29 pesos; a su vez, el diesel se ubica en los 39,79. En otras localidades la premium llegó hasta los 54 pesos.
La primera en ajustar sus precios fue la compañía Axion, que incrementó el viernes hasta 7 por ciento los precios de sus combustibles en el interior del país y la empresa Shell se sumó el sábado con un ajuste al alza de hasta el 6,86 por ciento.
Directivos de YPF dijeron a inversores en la Bolsa de Nueva York la semana pasada que el precio local de los combustibles aún no alcanzó el «umbral de rentabilidad». Mientras tanto, la Secretaría de Energía hizo circular un «manual» con recomendaciones del Gobierno para ahorrar “hasta un 30 por ciento de combustible” al usar el auto. Entre los insólitos consejos está evitar el aire acondicionado, no abrir las ventanas y tener un vehículo con caja automática.