La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) condenó este martes a Perú por la desaparición forzada de cinco personas en el marco de la lucha contra el terrorismo en las décadas de 1980 y 1990.
Tras analizar los elementos del caso, el Tribunal estimó que las cinco víctimas fueron “objeto de desaparición forzada en violación de sus derechos a la libertad personal, integridad personal, vida y reconocimiento de la personalidad”, refiere la sentencia.
Los desaparecidos
– Wilfredo Terrones Silva, abogado, desaparecido desde el 26 de agosto de 1992.
– Teresa Díaz Aparicio, estudiante universitaria, desaparecido desde el 19 de agosto de 1992.
– Néstor Rojas Medina, locutor de radio y estudiante de periodismo, desaparecido desde el 26 de enero de 1991.
– Cory Clodolia Tenicela Tello, estudiante, desaparecido desde el 2 de octubre de 1992.
– Santiago Antezana Cueto, estudiante, desaparecido desde el 7 de mayo de 1984).
«Esta (desapariciones) se desarrollaba, entre otros, en contra de miembros del Partido Comunista del Perú – Sendero Luminoso e iba dirigida sin distinción a sus miembros, colaboradores o simpatizantes», refiere la sentencia.
«Perú violó las garantías judiciales y la protección judicial, toda vez que las investigaciones no fueron iniciadas de oficio, ni llevadas a cabo con la debida diligencia en un tiempo razonable para identificar, procesar y, en su caso, sancionar a todos los responsables de dichos hechos ni para determinar el paradero de las referidas personas», destaca la sentencia.
La Corte ordenó a Perú seguir con las investigaciones necesarias para identificar, juzgar y sancionar a los responsables de las desapariciones forzadas de las cinco personas.