Una foto y ninguna solución. El presidente Mauricio Macri recibió a los rectores de algunas de las 57 universidades que están en conflicto desde hace más de tres semanas por la decisión de ofrecer solo un 15 por ciento de aumento a los docentes universitarios. Tras plantearles la difícil situación por la que atraviesa el país, Macri les aseguró que el conflicto sindical se resolverá. «Va a haber alguna cláusula de revisión», aseguró al ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, en una breve conferencia de prensa después del encuentro en el que participaron los rectores de la UBA, Alberto Barbieri, y de Córdoba, Hugo Juri, entre otros. «Si el Presidente se puso a la cabeza, esto se va a resolver», se esperanzó Barbieri.
La estrategia de llamar a los rectores luego de tres semanas de paro docente, con varias universidades tomadas y a dos días de una marcha universitaria que promete ser masiva tuvo que ver con mostrar a Macri preocupado por el tema y con respaldo de las autoridades de las universidades, si bien hubo escasas propuestas para resolver el conflicto. El Presidente decidió participar en forma personal, al punto de que la visita a Vaca Muerta que compartió con el CEO de Techint, Paolo Rocca, fue más corta de lo previsto para regresar lo antes posible a Buenos Aires. Ese gesto se sumó a la presencia de Finocchiaro en la reunión paritaria del lunes, algo que no había ocurrido antes. De esta manera el macrismo busca contrarrestar la contundencia de los números que demuestran el atraso salarial de los universitarios, tras el fracaso de la primera estrategia de viralizar un documento del Ministerio de Educación con información falsa o tendenciosa sobre las universidades, que luego debió aceptar que era incorrecto.
En el encuentro, Macri se ocupó de dejarle en claro a los rectores que la situación del país es muy difícil y que el Gobierno debe profundizar el ajuste para cumplir con el acuerdo del FMI. En la conferencia de prensa posterior, Barbieri relató: «Le planteamos como primer punto la paritaria docente». Indicó, además, que es esencial para el funcionamiento de las universidades la actualización salarial. «Fue muy bueno lo que dijeron el ministro de Educación y el Presidente, que el 15 por ciento ya no es un techo. Nos dijeron que van a hacer el máximo esfuerzo», sostuvo el rector de la UBA, quien indicó que otro de los reclamos fue el atraso en el envío de los fondos para gastos de funcionamiento que vienen sufriendo diversas universidades y, en particular, la de Buenos Aires. «El Presidente nos dijo que hoy mismo nos están transfiriendo el mes de julio. Esto es un avance», consideró Barbieri.
El rector de la UBA también dijo que, durante la reunión, le planteó los problemas presupuestarios en el área de Ciencia y Técnica y los retrasos en transferencias al CONICET. «Macri tomó nota del tema de los investigadores y dijo que va a buscar una solución», aseguró Barbieri. Las respuestas del ministro de Educación también estuvieron plagadas de buenas intenciones y pocas definiciones: «Vamos a seguir trabajando hasta llegar a una solución y hasta que nos pongamos de acuerdo», dijo Finocchiaro acerca de la paritaria. Consultado sobre la posibilidad de arancelar las universidades o impedir el ingreso de migrantes, solo dijo que «no es un debate que nuestro gobierno promueva».