Shanghái y la isla de Taiwán han sido las más golpeadas por el fenómeno meteorológico que ha dejado también cuantiosas pérdidas económicas a la nación asiática.
Las autoridades de China y Taiwán confirmaron este lunes que el número de fallecidos a causa de los tifones Malakas y Meranti aumentó a 31, mientras que la cifra de desaparecidos se ubica en 15.
Desde el pasado 14 de septiembre Meranti llegó a China y fue sucedido por Malakas durante el fin de semana. Ambas tormentas y los vendavales se han sentido en la ciudad de Shanghái y las provincias de Jiangsu, Zhejiang, Fujian y Jiangxi.
Millonarias pérdidas
En la parte continental los tifones causaron el derrumbe de 7.300 viviendas, así como daños en otras 61 mil y la destrucción de 106 mil hectáreas de campos de cultivo. Al menos 618 mil personas fueron evacuadas.
Las autoridades revelaron que las pérdidas económicas de ambos tifones se ubicaron en unos 2.320 millones de dólares.
Aunque las zonas interiores del país asiático no hayan sido golpeadas directamente por los tifones, se reportaron fuertes lluvias en Sichuan, donde seis personas murieron y 10 permanecen desaparecidas.
Una de las ciudades más afectadas fue Panzhihua donde se reportaron corrimientos de tierra y crecidas que cortaron algunas carreteras y dañaron numerosas viviendas, además, tres personas fallecieron luego de que sus viviendas quedaran atrapadas bajo el lodo, una de ellas fue arrastrada por la crecida de un río y otras dos fueron aplastadas por los talud de tierra.
Las inundaciones también destruyeron un puente de 871 años de antigüedad, tesoro del condado de Yongchun, confirmó la agencia de noticias Xinhua.
En la ciudad de Xiamen, en la provincia costera oriental de Fujian, iniciaron los trabajos de reconstrucción. En esta localidad se registró la tormenta de mayor fuerza desde que comenzaron los registros (en 1949).
Las tormentas afectaron el suministro eléctrico y cerca de 3,2 millones de casas se quedaron sin electricidad y agua, mientras que dos embalses se inundaron.