La candidata presidencial peruana Keiko Fujimori, que disputará la segunda vuelta el próximo 5 de junio, se manifestó este martes en contra del aborto y de la unión civil entre homosexuales durante una reunión en Lima con miembros de iglesias evangélicas, informaron medios de prensa locales.
La candidata se reunió este martes con cientos de representantes de las iglesias evangélicas, ante los que afirmó que está «a favor de la familia» conformada por hombres y mujeres y no entre personas del mismo sexo.
«He hablado primero del rol de la familia como pilar fundamental de la sociedad. Queda claro que no estoy a favor de la unión civil ni de la adopción de niños por parejas homosexuales y estoy en contra del aborto», declaró a los periodistas al término del encuentro, informó la emisora RPP Noticias.
Fujimori indicó que durante la reunión de este martes firmó un documento en ese sentido porque eso «coincide plenamente» con lo que piensa.
Según el diario Perú 21, en ese documento acordó «defender la familia, rechazar la unión civil, el matrimonio homosexual y la adopción de niños por parte de las personas del mismo sexo.»
Fujimori también se manifestó en contra del aborto en casos de violación y recomendó a las mujeres «que se queden con sus bebés porque el concebido no tiene la culpa de lo ocurrido».
«Les diría que lo tengan, he planteado una serie de propuestas en prevención y de ayuda a estas mujeres», aseguró la candidata, quien dijo que solo está a favor de esta práctica en caso de que esté en riesgo la vida de la madre.
Fujimori mantiene un empate técnico con Kuczynski, según un simulacro de votación que publicó el lunes la empresa privada GFK, que le otorgó 49,9 % y 50,1 % de intención de voto a cada candidato, respectivamente.
Por otra parte, la canciller peruana, Ana María Sánchez, dijo este martes ante una comisión del Congreso que el gobierno decidió que no era «conveniente» responder a las declaraciones del titular de la OEA, Luis Almagro, quien criticó el sistema de inhabilitaciones del país días antes de los comicios presidenciales del 10 de abril.
Antes de las elecciones, Almagro reclamó en su cuenta en Twitter «medidas para restablecer derechos de participación política de todos y evitar elecciones semidemocráticas» en Perú y consideró que el sistema de inhabilitación de candidatos que aplica el Jurado Nacional de Elecciones «no ofrece (las) garantías necesarias».
Según un comunicado del parlamento, Sánchez explicó este martes ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso que el Ejecutivo decidió que no era «conveniente» responder a Almagro, por considerar que sus opiniones eran a título personal y no un pronunciamiento oficial de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Las declaraciones de Almagro tuvieron lugar tras una reunión con el economista Julio Guzmán, cuya candidatura a la Presidencia fue excluida por las autoridades electorales del proceso debido a problemas en la democracia interna de su partido, Todos por el Perú.
El empresario César Acuña también fue excluido en marzo del proceso por haber repartido dinero durante su campaña, lo cual está prohibido por la ley electoral.
La legisladora opositora Lourdes Alcorta señaló este martes que no se podía guardar reserva ante las opiniones de Almagro, ya que eran de dominio público.
Mientras que la congresista fujimorista Luz Salgado consideró que las afirmaciones de Almagro fueron «ofensivas al país» y afirmó que la respuesta de la canciller era «poco feliz».