El canciller persa declaró públicamente que su país no va a renunciar a sus derechos y seguirá vendiendo su petróleo a Venezuela.

Irán denunció las acciones injerencistas de Estados Unidos (EE.UU.) en la región del mar Caribe y el despliegue de sus tropas en esta zona a fin de obstaculizar el envío de combustible persa a Venezuela.

En una carta enviada al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, y publicada este domingo, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, calificó como “piratería” las amenazas “ilegales, peligrosas y provocativas de EE.UU.”, y dejó claro que suponen un gran riesgo para la paz y la seguridad internacionales.

El pasado jueves, un funcionario estadounidense de alto rango dio a conocer que la Casa Blanca estaba considerando tomar medidas en respuesta al envío de combustible iraní a Venezuela, cargado en un buque cisterna que zarpó hacia el país suramericano desde puerto iraní.

El canciller iraní enfatizó en que el Gobierno de EE.UU. es responsable de las consecuencias que se deriven de cualquier acción ilegal, y ha subrayado que su país adoptará las medidas que crea necesarias y oportunas para contrarrestar este tipo de amenazas.

El comercio entre Irán y Venezuela es propio de dos países independientes, añadió el Canciller, quien afirmó que Teherán no va a renunciar a sus derechos y seguirá vendiendo su petróleo a Caracas. «Irán y Venezuela son víctimas de los embargos de Washington y han colaborado siempre para superar sus presiones», agregó.

La Marina de EE.UU. ha enviado cuatro buques de guerra al Caribe para un posible encuentro con los petroleros de Irán. Según los reportes, esos buques son el USS Detroit (LCS-7), el USS Lassen (DDG-82), el USS Preble (DDG-88) y el USS Farragut (DDG-99).