El condenado por el crimen de Darío Gramaglia habló sobre las irregularidades del Servicio Penitenciario. “(Segundo) Giménez es absolutamente responsable de esto. A mí no me queda la menor duda”, afirmó.
“No me extraña. Todos los presos sabíamos que se vendía droga en la cárcel. Todos lo sabíamos”, de esa manera se refirió Alberto Figueroa a la investigación que llevó adelante la Justicia Federal y que halló a un interno de la cárcel en San Luis como líder de una banda narco.
El hombre está alojado en la prisión de Pampa de las Salinas, pero durante muchos años permaneció en el complejo capitalino y admitió las diversas irregularidades de la que no son ajenos los directivos.
En el marco de una entrevista telefónica con El Chorrillero en la que habló de varios temas, dijo que los internos desconocían el “modus operandi” de la venta de estupefacientes, pero si estaban al tanto de la existencia.
El interno que manejaba la banda narco fue identificado como Dante Churquina. En su celda, la 5 del pabellón 2 de la Unidad N° 1 “Condenados Mayores”, secuestraron cinco celulares, una notebook, pagarés, una balanza de precisión, cannabis y documentación de interés para la causa.
Consideró “imposible” que las autoridades no estuvieran al tanto esto: “Son especialistas en saber. Saben cuando un interno tiene hasta un cigarrillo de marihuana en una celda. ¿Cómo no van a saber que se estaba vendiendo droga en esas cantidades? Claro que están al tanto”.
“¿Saben qué sucede? Yo no sé si reciben alguna retribución, pero es como que dejan hacer porque ellos tienen otras cosas para hacer o para ocultar”, indicó.
Figueroa aclaró que permanentemente son sometidos a requisas. “Para entrar elementos a la cárcel tenés que, aparte, pasar no solamente por toda entrada, sino que tenés que pasar por requisas, tanto el personal, como los presos y los familiares”, preciso.
En este sentido, advirtió: “Para que hayan entrado drogas, obviamente que tiene que haber un modus operandi donde hay una serie de autorizaciones o miradas hacia otro lado. Por supuesto que (Segundo) Giménez es absolutamente responsable de esto. A mí no me queda la menor duda”.
“Cuando yo en persona a Giménez le decía que estaban alquilando el tractor, que estaban vendiendo los animales en forma directa, siempre miraba para otro lado”, agregó.