No es la primera vez que el Presidente usa ese argumento para atacar al fuero laboral. En la asunción como canciller de Jorge Faurie habló de una “mafia de los juicios laborales” y le apuntó directamente al titular del bloque de diputados del Frente para la Victoria-PJ, Héctor Recalde, con reconocida trayectoria como abogado laboralista. Macri dijo que hay «un grupo de estudios laboralistas, que por suerte son una minoría” y “un grupo de jueces, minoritario, laboralistas, conducido por Recalde” que “le han hecho mucho daño a la Argentina».
Ayer, en una carta publicada en un diario cordobés, volvió a la carga con su ofensiva que tiene por objetivo forzar una reforma laboral regresiva, para la cual los magistrados del fuero laboral son considerados un escollo por el oficialismo.
En la carta en el diario, Macri afirmó que decidió «combatir la mafia de los juicios laborales, que tanto daño les hacen a las pequeñas empresas y a sus trabajadores».
«Una pyme que cierra sus puertas no vuelve a abrir más y los empleados pierden su trabajo», argumentó, en el marco de un nuevo capítulo de la campaña contra la Justicia del Trabajo.
