El hecho ocurrió en Posadas, Gustavo Pona estaba en su casa cuando fue alcanzado por cientos de abejas. «Vi venir miles y me salvé porque me tiré a la pileta», confesó el hombre.
Otra vez un enjambre de abejas mata. Hace dos semanas, en Santiago del Estero, atacaron a campesinos, que tuvieron que ser hospitalizados y mató aves de corral, en una casa de campo de la localidad santiagueña de Pozo Hondo.
Esta vez, ocurrió en un vecindario en Posadas, cuando un empresario gastronómico, Gustavo Pona, vivió momentos trágicos cuando vio venir un enjambre de abejas en su patio.
«Estaba cortando el pasto, cuando sentí un ruido raro. Miré, vi un enjambre sobre mi cabeza, miles de abejas y me salvé porque me tiré a la pileta. Cuando saqué la cabeza del agua, vi que atacaban a mis perros», contó el hombre.
«Esto no fue una catástrofe porque no estaban mis hijos, estaba yo solo. Fue desesperante. Salí de la pileta, corrí a la casa donde me puse ropa de abrigo y salí para auxiliar a los perros, pero ya estaban forrados de abejas y no podían caminar», agregó Pona. A pesar de que fueron asistidos, los perros murieron a los pocos minutos del ataque.
Gustavo, en tanto, fue atendido por un médico que le dio una inyección para neutralizar los efectos de los aguijones.