Los Gobiernos de Chile y de Bolivia han tenido otro roce diplomático luego que un grupo de militares bolivianos fue detenido por Chile en la frontera de ambos estados. El canciller chileno Heraldo Muñoz rehusó el acceso del ministro de Defensa boliviano Reymi Ferreira a Chile para visitar a los militares y demandó unas disculpas por unas supuestas declaraciones llamando a un boicot de productos chilenos en Bolivia.
Ferreira ha manifestado este martes que no pedirá disculpas a Chile. “Yo no tengo por qué pedir disculpas por algo que no he dicho”, indicó el ministro rechazando las acusaciones de haber promovido un boicot y ofendido a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet.
El ministro boliviano esperaba poder visitar a los dos militares y siete aduaneros que se encuentran detenidos por la policía de Carabineros. De acuerdo con Chile, estos fueron capturados en su país y fueron detenidos por robo, porte de armas y contrabando. Por su parte, Bolivia afirma que estas personas se encontraban realizando labores de combate contra el contrabando en territorio boliviano. Por lo que califican las detenciones como un secuestro.
Ferreira consideró que las acusaciones en contra de los nueve compatriotas son “incorrectas, injustas e infames” y aseguró que no los abandonarán hasta lograr su liberación.
Este incidente incrementa las tensiones entre los dos países que recientemente han revivido la discusión sobre 120 mil kilómetros cuadrados de territorio que fue invadido por Chile durante un conflicto bélico en 1879.