San Luis (LaNoticia) 11-11-16. La agrupación feminista se despachó contra el grupo de amigos del agresor y los dueños del boliche.
Sabrina Otero fue agredida en la madrugada del domingo en el boliche céntrico de la Av. Illia y Falucho, hasta el momento el agresor sigue en el anonimato, protegido por todos los que vieron la secuencia y no hicieron nada, entre ellos el personal del boliche y los amigos del agresor.
“¿Qué ocurrió con las personas que estaban en el local? ¿y los dueñxs? ¿el grupo de amigos del varón agresor? Es el silencio de los corderos…” y es lo que la mayoría nos preguntamos, un cobarde agrede a una mujer que se negó a darle un beso y es protegido, las marcas en la cara, producto de del impacto de un vaso, casi le cuesta la visión a la joven y ni esto sensibilizó a los cómplices del cobarde.
“Hay un cuerpo social herido profundamente, que si no despabila pronto, pone en riesgo la búsqueda infructuosa de “la medida de lo humano”. Queremos visibilizar que este varón violento no es un “enfermo” ni un “loquito” fue socializado por una cultura que entiende y legítima que los cuerpos de las mujeres pueden ser tomados y usados para el placer masculino. Día a día las mujeres somos domesticadas con el miedo de sufrir las consecuencias de quienes osamos cuestionar al patriarcado” y es cierto solo un enfermo puede reaccionar de esta manera al serle negado un mísero beso y lo más agravante la complicidad de todas la personas que lo vieron y se llamaron al silencio, ¿Cuántos de ellos/as en su muro habrán puesto #NiUnaMenos? Y hoy son cómplices de semejante atrocidad.
Federico Capella
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