Los partidos Junts pel Sí y CUP desafían al Tribunal Constitucional de España al aprobar una estrategia que asegure la independencia catalana a través de un referendo.
Los partidos independentistas catalanes del Parlament, Junts pel Sí y Candidatura de Unidad Popular (CUP), lograron que se apruebe por mayoría absoluta, entre un fuerte ambiente de división y oposición en la Cámara, la vía unilateral que fija los pasos a seguir para que Cataluña se separe de España.
El Parlament catalán decidió este miércoles, en el último minuto, incorporar al debate del día una votación para que se aprobaran o rechazaran las conclusiones de la comisión de estudio del proceso constituyente para iniciar la conformación de la República catalana independiente, y como tiene mayoría, el resultado final fue favorable para los independentistas que, según medios locales, con ello ha desafiado al Tribunal Constitucional (TC).
En su momento, el Parlament catalán ordenó la creación de la comisión que definiera una estrategia a seguir para iniciar la desconexión de Cataluña, entre la que se incluye un “mecanismo unilateral de ejercicio democrático”, que el bloque independentista sobrentiende que puede ser un referendo, pero el TC anuló la resolución soberanista que los independentistas habían tomado el año pasado por considerar inconstitucional un referendo unilateral.
Pese a la oposición del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC), Catalunya si que es pot (la marca de Podemos), Ciudadanos (C´s) y el Partido Popular (PP), la presidenta de la cámara, Carme Forcadell, indicó que «el pleno es soberano» y decidió seguir adelante con la votación, sin implicar abiertamente a la Mesa del Parlament en la decisión de avanzar en esta materia.
Y aunque los grupos parlamentarios de C´s y del PP abandonaron el hemiciclo en señal de protesta antes de que se procediese a la votación, esto no impidió que ella obtuviera 72 votos a favor y 11 en contra. El PSC no salió de la sala, pero tampoco participó en la votación, y el Catalunya si que es pot decidió votar en contra.
Por su parte, Carles Puigdemont, el presidente de la Generalitat (Palacio de la Generalidad de Cataluña, sede de la presidencia), anunció en la mañana de este miércoles que se enfrentará a una sesión de confianza el próximo 28 de septiembre para «resolver democráticamente un problema democrático», y así comprobar si el Gobierno autonómico tiene el apoyo necesario para poner a Cataluña a «las puertas de la independencia».
En contexto
En los últimos años el deseo independentista de Cataluña ha aumentado significativamente en la comunidad autónoma española. El pasado 29 de junio, el presidente catalán, Carles Puigdemont, llamó a acelerar el proceso de independencia mientras denunciaba la decisión de juzgar al ex presidente Artur Mas por organizar la consulta sobre la independencia de Cataluña en noviembre de 2014.
En esta consulta 2,3 millones de personas fueron preguntados si deseaban un Estado catalán y, en caso de que así fuera, si querían que este fuera independiente: el 80,76 % dio una respuesta afirmativa a ambas cuestiones. Sin embargo, el Tribunal Constitucional español declaró inconstitucional la consulta luego.