San Luis (LaNoticia) 15-06-16. “Dime cuán rápido es el dictamen de un fiscal o un juez y te diré cuánto les importa la causa”, podría ser un nuevo dicho del saber popular.
Casi con Alberto “Beto” Figueroa saliendo de ratificar su denuncia ante el juez Sebastián Cadelago Filippi -por una denuncia promovida por la Procuraduría contra la Violencia Institucional (ProcuVIn)-, el fiscal Ricardo Roche, que quiere ganarse el gran lugar en la Corpo Judicial, ya dictaminó. ¿Y cómo lo hizo? Como no podía ser de otra forma viniendo de él.
“Que vengo en tiempo y forma a contestar la vista conferida, manifestando que conforme el estado de autos y la orfandad probatoria existente, no se encuentran, a criterio de este Ministerio Publico, elementos de cargo que permitan tener por acreditado el grado de sospecha necesario a fin de proceder conforme lo normado en el Art. 147 del CPCrims respecto de persona alguna, lo que se solicita se tenga presente a sus efectos, salvo el más elevado criterio de SS”, dijo el escalador fiscal Roche.
Lo que se vería como increíble, es que el fiscal no ha leído todo el expediente, puesto que su par Ernesto Gabriel Lutens, quien en su momento expresó que se excusaba de actuar porque “en ese orden de ideas el suscripto intervino ejerciendo la acción pública tanto en la etapa de la instrucción como en la del Juicio plenario sosteniendo en ambas instancias la validez de la prueba que en definitiva sirvió para lograr la condena del recurrente, circunstancia que es pública y notoria. En el caso de duda o cuestionamiento a este punto, o si elevado criterio de VS lo cree necesario, desde ya ofrezco como prueba dicho expediente”. Es decir Lutens le dijo al mundo -salvo a Roche por lo visto- que los ADN que había manipulado a antojo del poder político la ex `perito estrella´, Judith Andrade, eran válidas y precisamente cuando a pedido del mecánico Pedro Soria, en el segundo juicio oral por el asesinato de Daría Gramaglia, se hizo una contraprueba en el Laboratorio de Genética Forense y allí su titular Virginia Divizia, dijo que las pruebas realizadas por Andrade eran `truchas´, aunque no utilizó ese término, pero dijo -palabra más, palabra menos- que no entendía cómo había obtenido esos resultados, Andrade, con el método que utilizó. Eso en buen criollo, significa que para Divizia, Andrade `dibujó´ los ADN para que la causa, armada a todas luces, cerrar al paladar del poder político sanluiseño.
Roche debió haber leído los argumentos de la ProcuVIn, para quien había elementos para investigar, pero claro, Roche no necesita leer, es más mientras menos lea, mejor, así va ganando escalones en la Corpo Judicial con resoluciones al gusto de sus máximos líderes.
Con la resolución de Roche a la vista, se puede asegurar que hasta el momento, Judith Andrade sigue al amparo de la Corpo Judicial, solamente falta ver qué hace el juez Sebastián Cadelago Filippi -también miembro de la Corpo-, teniendo en cuenta que el dictamen fiscal no es vinculante.
Carlos Rubén Capella
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