Una compañía de camiones de Queensland fue declarada culpable por infracciones relacionadas al cansancio del conductor y tuvo que pagar una multa de 165.000 dólares australianos, informó la Australian Broadcasting Corporation el 5 de mayo. Los directores de la compañía y algunos conductores fueron declarados culpables de 306 infracciones cometidas a lo largo de seis semanas. Se descubrió que los conductores permanecían detrás del volante durante más de 18 horas, falsificaban los libros de registro y no respetaban las pausas.
Según un informe de la OIT, los australianos estiman que el cansancio es la causa del más del 30 por ciento de los accidentes que involucran un sólo vehículo en las áreas rurales. Estudios realizados en ese país, indican además que el cansancio contribuye a deficiencias en el lugar de trabajo cuatro veces más que el alcohol o las drogas.
En Estados Unidos, el cansancio de los conductores es la causa de aproximadamente 100.000 accidentes de vehículos pesados y 1.500 víctimas mortales cada año, según el Consejo Nacional de Seguridad del Transporte.
Convenio 153 sobre duración del trabajo y períodos de descanso en conductores de transportes
La Conferencia General de la Organización Internacional del Trabajo convocada en Ginebra después de haber decidido adoptar diversas proposiciones relativas a la duración del trabajo y períodos de descanso en los transportes por carretera, adopta, el presente Convenio, que se aplica a los conductores asalariados de vehículos automóviles dedicados profesionalmente al transporte por carretera, interior o internacional, de mercancías o personas, tanto en el caso de que dichos conductores estén empleados en empresas de transportes por cuenta ajena o en empresas que efectúen transportes de mercancías o de personas por cuenta propia.
Aclara el Convenio que la expresión duración del trabajo significa el tiempo dedicado por los conductores asalariados a la conducción y a otros trabajos durante el tiempo de circulación del vehículo en su artículo 6, que la duración total máxima de conducción, comprendidas las horas extraordinarias, no deberá exceder de nueve horas por día ni de cuarenta y ocho horas por semana.
Refiere también que las duraciones totales de conducción a que se refiere el Convenio podrán calcularse como promedio sobre un número de días o de semanas que determinará la autoridad o el organismo competente de cada país.
Accidentes “Colectivos”
Preocupado por la necesidad de frenar los accidentes de tránsito que protagonizan los ómnibus de media y larga distancia, el gobierno bonaerense detectó que más del 25 por ciento de los conductores de transportes de pasajeros no descansa el tiempo que establece la ley, según informó DyN.
La falta de descanso de los conductores fue constatada en las terminales de La Plata y de tres ciudades balnearias, donde fueron labradas decenas de multas contra empresas, que permitían la salida de ómnibus manejados por choferes en infracción. El Ministerio de Trabajo provincial, a cargo del control, afirmó que 25,8 por ciento de los conductores relevados en las terminales de La Plata, Mar del Plata, Villa Gesell y Necochea se disponían a salir a la ruta sin haber descansado las 12 horas entre viaje y viaje que exige la normativa vigente.
La falta de descanso de choferes fue denunciada en 2007 por la Defensoría del Pueblo de la Nación. En ese momento se denunció que un 80 % de las empresas de ómnibus «incurre en reiteradas violaciones de las normas».
La Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), que realiza controles en la Capital y la costa atlántica, constató también la falta de descanso de choferes, y alertó que en algunos distritos la violación «de la norma es de 40 % de los relevados».
Por otro lado, los buses de dos pisos, según los estudios, son seguros si no superan los 100 km por hora de velocidad. Un informe de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) concluyó que los ómnibus de doble altura son seguros mientras no superen los 100 km/h, pero advirtió que en la actualidad no están dadas las condiciones que garanticen la confiabilidad absoluta de ese medio de transporte.
El estudio aclara que las velocidades reales del tránsito vehicular no condicen con las permitidas. De hecho, 100 km/h es el límite de velocidad en el nivel nacional para ese tipo de transporte en autopistas y es fácilmente comprobable que muchos ómnibus de larga distancia lo superan en las rutas.
“Los micros de doble piso son seguros, pero en las actuales circunstancias, teniendo en cuenta el estado de las rutas y las condiciones de trabajo de los choferes, no tanto”, precisó Enrique Filgueira, uno de los técnicos que elaboraron el estudio. Este fue hecho por pedido del Gobierno cuando empezaron a multiplicarse los cuestionamientos a esos ómnibus, que, en 2008, fueron protagonistas de accidentes que costaron la vida a 86 personas. Incluso, hay proyectos de ley que proponen prohibir su circulación.
Según los especialistas, las principales causas de accidentes de tránsito son la falta de descanso de los choferes, que cumplen agotadoras jornadas de 12 o 13 horas al volante, y el mal estado de numerosas rutas. Esto, sumado a la constante violación del límite de velocidad, conformaría un escenario fatal.
Por eso, entre las recomendaciones que realizó la UTN se destaca la de instalar en los ómnibus de doble piso un limitador de velocidad mecánico desde la fábrica para que no se exceda los 100 km/h establecido para circular en condiciones seguras.
Y para concluir debiéramos hacer una relectura de realidad con un vocablo griego `anagennao´, lejos de dar cuenta de un nacimiento, abraza la idea aún más desafiante de una nueva clase de comienzo. Comprender la vasta noción de transformación implica lisa y llanamente regeneración.
Regenerarse, volver a generar, proviene del griego, `palingenesia´. Palin significa volver o regresar, genesia habla de una genética que nos lleva al origen.
Nuevo nacimiento es recuperarse del viejo estadio del estancamiento, del parate que inmoviliza al atentar contra toda idea de progreso.
Podría abrazar la idea de copiar lo que hacen en la Unión Europea introdujo hace poco el tacógrafo digital para facilitar a los operadores y a las autoridades el control de las horas de conducción. Este instrumento mide y registra la velocidad y el tiempo de conducción, combina las funciones de reloj y velocímetro.
La Comisión Europea busca mejorar la seguridad en las rutas y las condiciones de trabajo de los conductores, y garantiza condiciones similares para la competencia entre las compañías de transporte. La Directiva de la Unión Europea sobre la jornada laboral entró en vigencia en 2005. Además, la Comisión está a punto de aprobar dos propuestas que revisan las normas de 20 años de antigüedad sobre el tiempo dedicado a conducir y mejoran su aplicación en la UE. Las normas que regulan la jornada de trabajo en la Unión Europea establecen que un conductor puede trabajar hasta 60 horas en una semana cualquiera, pero a lo largo de cuatro meses el promedio no debe superar las 48 horas semanales. En lo que se refiere al tiempo de conducción, hay límites diarios y quincenales de nueve y 90 horas respectivamente. El período de descanso diario es de al menos 11 horas, pero puede reducirse a 9 horas no más de tres días a la semana, y deben ser recompensados la semana siguiente.