Por 223 votos a favor, 4 en contra y 7 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó y giró al Senado el proyecto por el cual se crea la empresa Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado. Durante su tratamiento, el texto de la iniciativa enviada por el Poder Ejecutivo tuvo cambios propuestos tanto por el oficialismo como por la oposición.
Los bloques que apoyaron el proyecto fueron el Frente para la Victoria, Nuevo Encuentro, Movimiento Popular Neuquino, la Unión Cívica Radical, el PRO, el Socialismo, el Frente Renovador y la Coalición Cívica, entre otros. En contra lo hicieron los tres diputados del Frente de Izquierda y Victoria Donda (Libres del Sur); en tanto que cuatro del GEN, uno de Unidad Popular, una de Proyecto Sur y un radical se abstuvieron.
La sesión fue seguida en el último tramo por el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, quien en declaraciones a la prensa efectuadas en el Salón de los Pasos Perdidos destacó que «esta media sanción viene a completar el proceso de transformación ferroviario asociado al desarrollo de la economía argentina”.
El debate, que se inició poco antes de las 13:00, fue abierto por la presidenta de la comisión de Transporte, María Eugenia Zamarreño (Frente para la Victoria), quien aseguró que el proyecto de estatización del sistema ferroviario «no es un eslogan marketinero» y subrayó que se trata de «una modificación del paradigma del Estado frente al uso de los trenes y la gestión del uso de los trenes».
El aliado Carlos Heller (Nuevo Encuentro) consideró que «éste es un tema clave, porque todo lo que pasó en la Argentina de los ´90 se construyó sobre el trabajo ideológico de instalación previa de que la eficiencia era sinónimo de la actividad privada y que lo público era sinónimo de ineficiencia, y en ese marco se crearon las condiciones para llevar adelante todo el proceso de desguace del Estado y de privatización de todas las empresas del sector público”.
«Los que tienen ese pensamiento son aquellos que creen que la eficiencia se mide por el último renglón del balance, es decir, cuánto ganan las empresas, porque las conciben siempre desde el punto de vista del lucro y no entienden que hay una cuestión más trascendente, que es el fin social que cumplen», remarcó.
La presidenta del bloque kirchnerista, Juliana Di Tullio, encargada de cerrar el debate, dijo que el proyecto lleva a “una estatización total» del sistema ferroviario y apuntó que “con esta ley se están construyendo una política de Estado».
“Les jode como ampolla que Cristina reestatice los ferrocarriles. Les jode que Menem los haya privatizado y que Cristina los reestatice”, dijo la diputada en respuesta a las críticas opositoras.