La Cámara Industrial de Manufacturas de Cuero y Afines (CIMA) advirtió que las importaciones en el sector aumentaron un 41,5 por ciento en los primeros 8 meses del año, lo que significó un aumentó de 8 millones de unidades más que las ingresadas en 2016.
«La suba de importaciones ha sido letal para un sector que ya perdió más de 1.400 puestos de trabajo y el cierre de más de 50 empresas», denunció Ariel Aguilar, presidente de CIMA.
La cámara precisó que en lo que va del año ingresaron 27.327.506 unidades de productos de marroquinería, contra las 19.306.009 en el mismo período de 2016, mientras que «el sector continúa con una caída en las ventas de un promedio del 20 al 25 por ciento» y «el uso de la capacidad instalada en un 65 por ciento».
El informe del CIMA aporta otros datos que reflejan la crítica situación en el sector: «Los ingresos del periodo enero/agosto 2017 fueron un 9 por ciento menores, 7 millones de dólares menos que igual periodo 2016», lo que «confirma la continuidad de maniobras de subfacturación».
Los productores realizaron un nuevo llamado de atención al Gobierno, ya que «no sólo a los productores locales pierden, sino también al Estado, que deja de percibir los impuestos correspondientes».