A través de su letrado, Alejandro Rúa, el ex canciller presentó un breve escrito en el que le pide a Bonadio que lo habilite para prestar una “declaración espontánea” para así “aclarar los hechos” que fueron denunciados por el fallecido fiscal Alberto Nisman.
Rúa invocó la «situación de salud» de Timerman y pidió que «se fije próxima audiencia a fin de que pueda presentarse ante el juez competente a fin de declarar, en una presentación espontánea para aclarar los hechos».
De esta manera, el ex canciller se propone que Bonadio escuche una explicación acabada acerca del Memorándum con Irán, especificó Rúa «quiere aclarar bien cómo fue el tema. No quiere más dilaciones en los tiempos, ni que se especule con los tiempos electorales», indicó.
Rúa puso en duda que Bonadio acepte el pedido, pero insistió con la necesidad «de brindar explicaciones» ante una serie de acusaciones que, consideró, «carecen de fundamento».
El letrado también se refirió al testimonio del ex embajador en Siria, Roberto Ahuad, quien ante el fiscal Gerardo Pollicita dijo que le habían dicho que Timerman se había reunido en secreto con el embajador de Irán, Alí Akbar Salehi, sin aportar ninguna prueba. Dicho testimonio servía de base en la denuncia de Nisman por el supuesto encubrimiento de los iraníes acusados de cometer el atentado en la AMIA. Según el fallecido fiscal, el ex canciller negoció el Memorando de Entendimiento con Irán en aquel viaje a Siria, en 2011.
Sin embargo, en posteriores declaraciones periodísticas, Ahuad se desdijo. “No puedo confirmar lo que yo no sé. Han puesto en mi boca cosas que yo no dije”, señaló Ahuad, cuando le citaron un pasaje de su supuesta declaración: “El ex embajador argentino en Damasco, que es usted, reveló ante la justicia que el canciller Timerman mantuvo un encuentro reservado con el canciller iraní en Alepo en el 2011”. “No, no surge de la declaración. No es mi declaración porque no es la verdad. Yo no pude confirmar eso porque no estuve en la reunión, no participé y no estuve informado. Lo mantuvo en secreto el canciller. Será él el que tenga que explicar el por qué. Lo que transmití fueron trascendidos”, insistió entonces Ahuad.
«Lo de Ahuad ni siquiera es una contradicción. Ahuad no sabe qué pasó en Alepo porque no existió esa reunión. No hubo una reunión en Alepo con lo iraníes. Clarín había dicho que el ex embajador había confirmado esa reunión, cuando no dijo exactamente eso», remarcó Rúa.
El abogado de Timerman recordó que hubo una denuncia por falso testimonio contra Ahuad, luego de que el ex embajador dijera que no había sido informado del viaje del ex canciller a Alepo. «El viaje de Timerman fue público, hubo una invitación del presidente sirio, pero jamás se juntó allá con (el embajador de Irán) Salehi», detalló.
En otro escrito anterior presentado en junio pasado, el ex canciller había anticipado su intención de «explayarse» sobre «encuentros secretos o públicos que sí se mantuvieron con funcionarios iraníes», pero en ese momento lo condicionó a un eventual apartamiento de Bonadio del caso. La recusación de Bonadio, presentada por su defensa, fue rechazada tanto por el juez como en las instancias de apelación, y por ello ahora entregó un nuevo escrito en el que pide declarar ante el magistrado.
El fiscal federal Gerardo Pollicita, mientras tanto, prepara un dictamen donde pedirá que se cite a declaración indagatoria a la ex presidenta, a Timerman y a los demás imputados en la causa.