Cortinas de humo sociales que despintan la realidad que causan accidentes e incidentes tales como las quince víctimas fatales en la ciudad de San Rafael, niños que perfectamente podrían haber sido hijos nuestros, donde autorizan vehículos que no están en condiciones para viajar y nadie realiza algo al respecto, donde hoy todos nos sensibilizamos con los afectados, pero en su momento muchos olvidaron controlar lo que correspondía, esto me lleva a citar a Jorge Luis Borges.
Al espejo
¿Por qué persistes, incesante espejo?
¿Por qué duplicas, misterioso hermano,
el menor movimiento de mi mano?
¿Por qué en la sombra el súbito reflejo?
Eres el otro yo de que habla el griego
y acechas desde siempre. En la tersura
del agua incierta o del cristal que dura
me buscas y es inútil estar ciego.
El hecho de no verte y de saberte
te agrega horror, cosa de magia que osas
multiplicar la cifra de las cosas
que somos y que abarcan nuestra suerte.
Cuando esté muerto, copiarás a otro
y luego a otro, a otro, a otro, a otro…
La tendencia encierra una realidad que haría estremecer a Jorge Luis Borges, que se enfrentaba al fantasma del otro a través de los espejos. De qué tendencia hablamos, que lamentablemente hemos naturalizado la mentira, es doloroso admitirlo, pero una mal sana costumbre nos corroe, mentimos como desfachatados.
Los Gobiernos mienten en sus estadísticas, en teatralizar las políticas públicas y obviamente nuestros líderes no salen de un repollo, salen de la sociedad, de nuestra comunidad.
Donde algunos de nosotros tienden a mentir a través de las redes sociales. Se informó que las redes sociales iban a democratizar la palabra.
Se democratizó el insulto, la amenaza, las operaciones políticas disfrazadas de comentarios, el engaño que se dio en llamar posverdad y ahora, la mentira complaciente de los usuarios.
Las redes sobre sí misma, engloban una red de mentiras en diversas situaciones; Esto Remite a fotos de cuando eran más jóvenes, borran las que no los favorecen, pegan artículos de diarios para parecer informados (no leen uno ni que los maten), dan un “Me gusta” a cosas que ni entienden pero que, suponen, les da un aire intelectual, editan sus fotos pare ser más bellos, falsean su real estado de ánimo y su real estado civil, mienten sobre sus calificaciones universitarias para mejorar su imagen, dicen haber estado en donde nunca llegaron, juran haber leído libros que jamás leyeron y posan al costado de autos que no son suyos, para citar sólo las mentiras más comunes.
En lugar de intentar ser lo que pretenden, pugnan por aparentar lo que no son. Es una batalla predestinada a la derrota y, tal vez, a la humillación del espejo implacable; a la de ese instante a solas, acaso en la alta noche, cuando un ramalazo de realidad hace volar el castillo y los naipes. Y es doloroso también: quienes mienten tanto, no deberían quejarse cuando les mienten mucho.
Querido lector, usted sabe que todo tiene un por qué, y usted que me lee sabe que tengo un por qué en hacer esta analogía.
Representantes que han sido elegidos por el voto popular
Ahora bien, al pasar cité a la posverdad, y es toda una filosofía, adentremosno en ella, y para ello siguiendo la cronología y etimológicamente hablando el que a mi criterio algo dijo sobre esto fue Fernand Braudel, con sus conceptos braudelianos que son hipótesis no probados. Para mí la postverdad se asemeja con Longue durée (larga duración) y es una noción más que una técnica para considerar cambios geográficos, climáticos, salubres. Cambios que toman muchas décadas o siglos para ser notados.
Y ahora la postverdad, según Oxford, la define como circunstancias en las que los hechos objetivos son menos influyente en la formación de la opinión pública que la apelación a la emoción y la creencia personal.
En definitiva la posverdad es sinónimo de mentira o cortina de humo. Que es una nueva palabra para señalar viejos problemas o incluso para enmascararlos de nuevo. En las sucesivas rondas de intervención el debate se abrió en diversos frentes que transcurrieron en paralelo o captaron momentos de relevancia.
Y así transcurre la vida, donde este soneto maravilloso de Borges donde vive controlado por los espejos, hoy es tapado por cortinas de humo, y ese humo causa accidentes e incidentes viales tal como vemos.
En conclusión otro aspecto destacado fueron las referencias a la crueldad que puede generar la verdad.
Todos recordamos al Dr. House, sincero pero sin tacto alguno. ¿Soportamos la verdad y solo necesitamos un poco de tiempo? O ¿Preferimos mentiras piadosas (posverdades) para poder afrontar la verdad?
Los invito a reflexionar, debemos salir de las posverdades y siguiendo con Dr House: “todos mienten” porque en cierta forma hay una post verdad que nos permite no afrontar la verdad.
Les propongo que el cambio surja, dejemos las post verdades, y comencemos en esos diversos aspectos a afrontar la verdad, accionar contra ella y dejar de cegarnos frente accidentes, sensibilizarnos, cuando tuvimos nuestra oportunidad de hacer algo y muchos decidieron mirar hacia otro lado, encontrando en las post verdades las situaciones más convenientes para el momento.