La Sala I Cámara de Apelaciones de San Martín otorgó el beneficio de la excarcelación extraordinaria para Higui, Eva Analía De Jesús, quien permanecía detenida desde el 8 de noviembre pasado por matar a uno de los diez integrantes de una patota de hombres que intentaron violarla para «sacarle lo lesbiana». Higui había sido trasladada recientemente al penal de Magdalena, donde pasó su cumpleaños 43 y había sufrido restricciones para recibir visitas. Su liberación llegó tras meses de reclamos por parte del movimiento feminista, que llevó la consigna «Libertad para Higui» como uno de las banderas de la última movilización de Ni Una Menos. «Ahora, las mujeres también podemos esperar los juicios en libertad. Nadie reclama por nosotras, salvo los movimientos feministas», celebró la abogada de Higui, Raquel Hermida.
La abogada aseguró que el dictamen de la justicia de San Martín «marca una diferencia jurisprudencial» —ya que aporta una perspectiva de género, específicamente para la comunidad lésbica, en materia de excarcelaciones— y subrayó que permitirá «empezar a hablar de qué es una `violación correctiva´, que no solo tiene por finalidad el abuso sino modificar la identidad de una persona». Hermida agradeció el respaldo de las mujeres y organizaciones feministas que impulsaron la campaña «Libertad para Higui».
La decisión de la Sala I llegó luego de la audiencia realizada el jueves pasado en la que la defensa de Higui solicitó su excarcelación o, en su defecto, la detención domiciliaria. El tribunal decidió otorgar el beneficio de la excarcelación extraordinaria por lo que, tras siete meses de detención, Higui esperará en libertad el juicio oral por el homicidio en defensa personal por el que está acusada.
La detención preventiva de Higui la había ordenado la jueza Elena Persichini, a cargo de la causa que se le sigue por homicidio. Higui es del barrio Lomas de Mariló, donde desde chica sufre ataques y es discriminada por ser lesbiana. Pero el 16 de octubre, un grupo de diez hombres la atacó a golpes y patadas e intentaron violarla para «sacarle lo lesbiana», ella se defendió y mató de una puñalada en el pecho a uno de los diez abusadores.
Persichini ordenó la detención en noviembre, desde cuando permaneció detenida en el Destacamento de Mujeres de San Martín. A punto de cumplirse los siete meses de detención, la jueza decidió ordenar el traslado de Higui al Penal de Magdalena y sostuvo que debía permanecer bajo detención provisional con psicólogos a la espera del debate oral. La Sala I de la Cámara escuchó a la abogada de Higui y el reclamo social por su liberación.