Una encuesta realizada por el Instituto de Investigación de Paraná, en Brasil, muestra que al menos el 90,6 por ciento de los brasileños quiere que se realicen elecciones directas, lo que se traduce en la salida de Michel Temer del Palacio de Planalto, sede del Poder Ejecutivo de ese país.
La investigación también aporta datos sobre la baja popularidad de Temer, quien ascendió al poder tras un golpe parlamentario contra Dilma Rousseff. Los resultados muestran que solo el 6,4 por ciento de los brasileños aprueba su gestión, mientras que el 74, 8 por ciento la considera una mala administración.
El sondeo también arrojó que el 73,5 por ciento de los encuestados no dan un voto de confianza a Temer porque consideran que él no es garantía de mejoras en la economía y que la permanencia de Temer podría profundizar la mayor depresión económica en la historia de Brasil.
Los brasileños expresaron el deseo de que Temer salga de la Presidencia y su sustituto sea elegido a través de la realización de elecciones directas.
El pasado domingo 28 mayo, al menos 50.000 personas colmaron las calles de Copacabana para solicitar elecciones directas.
