San Luis (LaNoticia) 03-04-17. Primero fue la denuncia de un ciudadano al que le secuestraron la moto, ahora una auditoría reveló cuatro más.
Es evidente que la gestión municipal que encabeza Enrique Ponce tiene una materia no aprobada en cuanto al debido control que se debió ejercer sobre los vehículos que los inspectores municipales secuestraban por diferentes motivos y que llevaban al corralón dispuesto para ese fin.
Todo comenzó con la denuncia de un ciudadano al que le secuestraron la nota por falta de documentación, quien pagó la correspondiente multa y cuando fue a retirar su moto se encontró con la sorpresa de que la misma había sido robada del lugar a donde se supone que solamente ingresaba determinado personal municipal.
Luego se conoció un segundo caso, totalmente idéntico al primero, y ahora dieron a conocer el resultado de la auditoría que se realizó como motivo de aquellos casos. Allí se comprobó que, a las dos primeras motos robadas, hay que sumarle cuatro más.
Las grandes preguntas serían ¿Y los controles dónde estaban? ¿Quién debía controlar que los robos no se produjeran? ¿Había controles o era tierra de nadie ese lugar?
Información oficial
Desde el Municipio capitalino se informó oficialmente que José Pereira en su carácter de Secretario de Seguridad informó que la auditoría que se hizo en el depósito que la Dirección de Tránsito posee en calle Pringles 358 “detectó el faltante de 4 de esas motos, cuyos dueños han sido identificados y se los contactará desde el Municipio para determinar los pasos a seguir”.
“El faltante de las 4 motos se determina a partir de la inspección de los libros de guardia los cuales fueron confrontados con la cantidad de vehículos existentes. Las 568 motos fueron agrupadas en 30 lotes, los cuales fueron lacrados con precintos numerados y también fueron inventariados 91 automóviles”, sostuvo el secretario de Seguridad.
Carlos Rubén Capella
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