Brasil sufrió un estancamiento con respecto al índice de Desarrollo Humano (DH) elaborado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) cuya última edición fue publicada este martes.
El país suramericano ocupó la posición número 79 de entre 188 países evaluados. Brasil obtuvo una nota del 0,75 igual que el año pasado y según el informe que elabora el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el país empeoró bastante en la renta.
El PNUD advirtió sobre el impacto que las medidas de austeridad del presidente interino, Michel Temer, podrían tener en los sectores sociales más vulnerables.
«Brasil tiene que retomar la actividad económica sin perder de vista la necesidad de mantener un piso de protección social , esas políticas sociales son como un colchón para momentos de crisis como este», advirtió la coordinadora del informe para este país, Andréa Bolzon.
La mayor economía de América Latina está en recesión desde hace más de dos años, con una contracción del PIB de 3,8 por ciento en 2015 y 3,6 por ciento en 2016.
A pesar de haber detenido la trayectoria de mejora en los últimos años, Brasil sigue clasificado en el grupo de países de «alto desarrollo humano», la segunda mejor categoría ya que la primera es «muy alto» y las otras dos son «medio» y «bajo».
La expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, afirmó que los resultados del PNUD «ilustran la severidad de la crisis en la cual se encuentra el país».