Un estudio del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos indicó que el juicio contra Saif al Islam Gadafi y otros 36 altos cargos del gobierno del presidente libio Muamar el Gadafi no cumplió con los esquemas internacionales de un juicio justo.
La comisión evaluó todo el proceso jurídico, entre ellos los expedientes de la investigación y la sentencia. Este martes la institución veladora de que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la misión de Naciones Unidas en el país (UNSMIL) respeten las libertades esenciales publicaron sus conclusiones sobre los juicios.
El documento del Alto Comisionado reveló serias violaciones al debido proceso, que incluyen periodos prolongados de incomunicación para los inculpados, y alegatos de tortura que no fueron debidamente reconocidos.
En el informe también se presentaron quejas por parte de los abogados quienes manifestaron dificultades para entrevistarse con sus defendidos de forma privada y para el acceso a la documentación pertinente.
La investigación además exponen que el derecho a la defensa fue socavado porque no se llamó a testificar en la corte ningún testigo del fiscal, y el tribunal limitó los testimonios de los defendidos a dos para cada uno.
En el informe se denuncia al sistema judicial libio, este no permite una apelación completa sino solo una revisión parcial de aspectos legales específicos (Corte de Casación).
El estudio también recomienda a las autoridades libias que revisen el Código Penal y el Código de Proceso Criminal, por que su sistema judicial no se adecua a los estándares internacionales.
La sentencia más severas de pena de muerte fue dictada a nueve de los acusados, incluido Saif al Islam Gafadi, el antiguo jefe de Inteligencia Abdulá al Senussi y el ex primer ministro Al Baghdadi al Mahmudi.