El exdiputado Eduardo Cunha promotor del proceso de juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff, fue detenido por la Policía Federal en su casa en Brasilia este miércoles por orden del juez Federal Sergio Moro, después de haber perdido su inmunidad parlamentaria la semana pasada.
Cunha es dirigente del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), al que pertenece el presidente interino Michel Temer, quien está en el poder desde el pasado 31 de agosto, tras el golpe parlamentario en contra de la presidenta Dilma Rousseff
El político es sospechoso de recibir sobornos para liberar recursos de la Caixa Económica Federal además de lavado de dinero, evasión de impuestos, entre otros delitos.
También se le acusa por recibir 5 millones de dolares en sobornos procedentes de los contratos de exploración de petróleo de Petrobras en África.
Su esposa, la periodista Claudia Cruz, se encuentra siendo investigada por los mismos cargos. De acuerdo a la prensa local será trasladado a la ciudad de Curitiba en donde según estaban centradas sus operaciones de corrupción con Petrobras.
En contexto
En julio pasado, al renunciar a la presidencia de la Cámara baja en medio del proceso que finalmente le costó el escaño, Cunha se enorgulleció de haber iniciado el trámite que llevó a la caída de Rousseff. «Estoy orgulloso por haber ayudado a que Brasil se librara de uno de los gobiernos más corruptos que ha tenido», declaró entonces.
Sin embargo, Cunha, al iniciar el proceso contra la exmandataria, ya era investigado por su presunta participación en la red de corrupción que operó en la petrolera estatal Petrobras