San Luis (LaNoticia) 20-02-15. La diputada nacional por San Luis, Berta Arenas, presentó un dictamen de minoría, con algunas modificaciones respecto del dictamen oficialista de la Ley Nacional de Inteligencia, que creará la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en reemplazo de la disuelta SIDE.
Luego de participar del plenario de Comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Legislación Penal, la diputada Berta Arenas, integrante del Bloque Compromiso Federal, y una de las pocas opositoras presentes en la sala de reuniones del anexo de la cámara baja, presentó un dictamen de minoría sobre la modificación de la Ley de Inteligencia Nacional.
“Creemos que esto es un simple maquillaje, no se están tratando las cuestiones de fondo sobre la normativa que regula el Sistema de Inteligencia Nacional” comenzó diciendo Arenas, quien detalló los aspectos más salientes del proyecto:
En primer lugar, ningún organismo de inteligencia dependiente del Poder Ejecutivo Nacional podrá llevar a cabo sus actividades sin previa autorización del juez competente.
Por su parte, la actual Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia se reformula, en otra Comisión Bicameral de Control, la que se concibe con mayores poderes y con una nota distintiva: la misma estará compuesta por 6 senadores y 6 diputados, debiendo garantizarse que la mayoría absoluta de su composición corresponda a representantes de agrupaciones políticas opositoras y no podrán ser presidentes o vice, los legisladores del partido gobernante ni circunstanciales aliados. Su objetivo será controlar al Sistema de Inteligencia Nacional y tendrá amplias facultades para investigar y controlar de oficio.
Otro de los puntos destacados es que solo podrán ingresar al plantel de los organismos de inteligencia aquellas personas que además de cumplir con todos los requisitos, aprueben concursos de antecedentes en las condiciones que establezca la reglamentación.
En los últimos párrafos, se proyecta que solo la Corte Suprema de Justicia de la Nación, podrá ser el encargado de ejecutar las interceptaciones o captaciones ordenadas por la autoridad judicial competente. “Este es un duro golpe a los `amos de la oscuridad´, por llamar de alguna manera a nefastos personajes que se escudan en resabios normativos y prácticas institucionales ilegales heredadas del autoritarismo que hemos padecido los argentinos. Si los jueces son los únicos que pueden `invadir´ legalmente nuestra intimidad, la mejor solución es que esta cuestión tan sensible quede en manos del Máximo Tribunal Federal”, terminó diciendo Arenas.
Carlos Rubén Capella
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