El paso de los estudiantes fue bloqueado con gases lacrimógenos y cisternas cuando iban al Palacio de La Moneda.
Miembros de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) fueron dispersados y reprimidos este martes por agentes policiales durante su marcha hacia el palacio de La Moneda.
La corresponsal de TeleSUR en Chile, Thiare Valenzuela, informó que los opositores al proyecto de reforma educativa en la nación, iniciaron su movilización a las 11:00 hora local, sin autorización de la Intedencia Metropolitana, con el objetivo de entregar una carta a la mandataria Michelle Bachelet y hacer valer sus derechos.
En el transcurso, el gremio estudiantil fue recibido por contigentes de carabineros que con gases lacrimógenos y cisternas intentaron impedir que llegara a su destino. Sin embargo, los estudiantes continuaron su paso.
Valenzuela indicó que los manifestantes se oponen a la normativa propuesta por el Gobierno, que ya se encuentra en el Congreso, porque consideran que no tuvo la suficiente participación de los movimientos estudiantiles y que la discusión no tomó en cuenta aspectos como la garantía de la gratuidad de la educación y el financiamiento de los centros educativos públicos.
De acuerdo con la Confech, el Gobierno no ha profundizado en cómo el proyecto fortalecerá la educación pública ni en la regulación que existirá hacia los centros privados que hay en el sistema.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), Camila Rojas, sostuvo que «la idea es sociabilizar nuestras demandas. Tenemos claro que es necesario interrumpir lo menos posible la vida normal de los santiaguinos y santiaguinas».
Ante la negativa de las autoridades, el vocero de la Confech, Gabriel Iturra, expresó que están obligados a salir a las calles. «La irresponsabilidad es de la Intendencia que no da las autorizaciones. Es nuestro legítimo derecho», dijo.
Opiniones contra la reforma
Desde la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción, el dirigente Mauricio Rivas lamentó que la democratización sea un concepto que sólo se está asociando a universidades estatales y criticó que el desarrollo de la gratuidad se asocie al crecimiento.
Por su parte, la presidenta del Consejo de Presidentes de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Nicole Rodríguez, señaló que no tenía tanta esperanza en una respuesta favorable del Gobierno y ahora sólo apunta a redefinir la estrategia del movimiento, frente a la carencias del proyecto en materia de gratuidad y endeudamiento.
Asimismo, el rector de dicha universidad privada, Christian Schmitz, indicó que la reforma busca fortalecer el desarrollo de las instituciones estatales, sin considerar el compromiso social del resto.
“Nosotros no somos una universidad privada”, sentenció Schmitz, mostrando preocupación por que se los deje “al margen o en una situación de desigualdad con respecto a las instituciones de carácter estatal”.
En contexto
Hace una semana las autoridades consideraron como «sentido común» rechazar la convocatoria estudiantil, pues el domingo 10 de julio, la Confech también realizará una marcha, que sí está autorizada aunque es de carácter «familiar».
El proyecto de Educación Superior ha sido rechazado por algunos rectores de casas de estudios superiores que rechazan los principios fundamentales de la normativa, puesto que hasta ahora no hay claridad de financiamiento basal y transferencias de recursos, así como tampoco de quiénes han trabajado en la reforma.