Marcharon en protesta de la ola de despidos en el sector, y contra el tristemente famoso artículo 85 del blanqueo que intenta maniatar a la prensa. Varios medios ligados al gobierno no se hicieron eco de la noticia.
Gremios del ramo informativo repudian el proyecto de ley para sancionar con onerosas multas a periodistas que reporten el blanqueo de dólares.
Periodistas argentinos realizaron este miércoles una movilización histórica contra los despidos, cierres de publicaciones, precarización laboral, ajuste salarial, y defensa de la libertad de expresión.
La concentración inició a partir de las 13:30 en el Obelisco, centro de la ciudad de Buenos Aires (capital), con destino al Ministerio del Trabajo en la avenida Alem.
La convocatoria fue hecha por las federaciones de prensa, FATPren y FeTraCom, también por todos los gremios de periodistas del país. Al acto fueron citados los estudiantes de periodismo y comunicación social cuyas facultades se lo permitan.
«Se trata de una convocatoria unitaria de características históricas a la altura de los desafíos que encaramos los y las trabajadores de prensa: la lucha contra los despidos, los cierres, la precarización laboral, el ajuste en nuestros salarios y en defensa de la libertad de expresión», expresó el Colectivo de Trabajo de Prensa (CTP).
En el comunicado esa agrupación señala que de diciembre hasta la fecha se perdieron más de mil puestos de trabajo en la Ciudad de Buenos Aires en el ámbito periodístico, unos seis por día. La Federación Argentina de Trabajadores de la Prensa amplió esa cifra a 2.500 a escala nacional.
Vale acotar que este martes 7 de junio, los periodistas argentinos celebraron su día en un clima de protestas, despidos y empobrecimiento salarial.
En contexto
La estabilidad laboral en Argentina tambalea cada día a tal punto que ha sido calificada como la peor en los últimos 10 años de historia de esa nación gobernada por Mauricio Macri, quien se ha encargado de despedir a miles de personas.
La pérdida de empleos, así como el aumento de suspensiones y el deterioro del salario real, son las tres combinaciones que el Observatorio del Derecho Social (ODS) considera difícil de enfrentar en momentos en que el país atraviesa la peor crisis laboral.